El Cosmos… el todo… y dentro de él, un pequeño planeta azul… con una humanidad que se pregunta… ¿De dónde venimos?... ¿Qué hacemos aquí?... ¿Hacia dónde vamos?... ¿Quiénes somos?.
HUMANIDAD Y COSMOS es un programa que trata de traerle a usted eso que siempre se preguntó y nunca tuvo la oportunidad de escuchar… Hechos históricos ocultados, fenómenos insólitos, creencias, mitos y leyendas, arqueología proscripta, seres extraños, energías prohibidas, noticias curiosas, científicos censurados, el misterio de los objetos voladores no identificados, profecías y vaticinios, sociedades secretas, ecología, enigmas y soluciones para vivir física y espiritualmente sanos.
Un equipo de la Universidad de Rochester logró la invención de una lente
de invisibilidad que consiste en realidad de cuatro lentes separadas que pueden
ocultar al ojo humano en la banda de la luz visible, objetos tan grandes como
el tamaño con que se fabrique la lente compuesta.
Muchos escritores imaginaron la posibilidad de lograr la invisibilidad.
Cada día se da un paso más hacia la consecución de un sueño que hace tiempo imaginaron muchos escritores: crear un
material que vuelva la materia invisible.En los últimos
años, se han presentado varios diseños y
prototipos de capa de invisibilidad, pero con bastantes limitaciones,
incluyendo que el tamaño del objeto a ocultar debía ser minúsculo, casi
microscópico, o que el efecto de invisibilidad se conseguía solo en bandas muy
estrechas del espectro electromagnético, no necesariamente en la de la luz
visible, o solo para un color de esta.
Joseph Choi, con un ojo y parte de su cabeza invisibles, en la universidad de Rochester.
Un avance
notable se ha producido ahora con la invención
de una lente de invisibilidad (compuesta en realidad por cuatro lentes
separadas) que puede ocultar en la banda de la luz visible objetos tan grandes
como el tamaño con que se fabrique la lente compuesta. El prototipo de
pruebas puede por ejemplo volver invisible un sector considerable de una mano a
medida que esta pasa por detrás de la lente.
John C. Howell, uno de los creadores de la lente de invisibilidad.
Por otra
parte, este ingenioso logro del equipo de John
C. Howell y Joseph S. Choi, de
la Universidad de Rochester en el estado de Nueva York, Estados Unidos, no solo
resuelve algunas de las limitaciones de dispositivos previos, sino que además utiliza, en una configuración
novedosa, materiales baratos y fáciles de obtener.
Howell y
Choi desarrollaron una combinación de
cuatro lentes, hechas con materiales normales, que mantiene al objeto oculto
cuando se mira desde la dirección de visualización óptima, e incluso aunque
el observador se desplace a una perspectiva visual desviada de la óptima en unos
cuantos grados.
Investigaciones anteriores sobre invisibilidad
Muchos
diseños anteriores de capas de invisibilidad funcionan solo cuando miramos
hacia el objeto desde la dirección óptima, pero si miramos desde una perspectiva visual ligeramente distinta, el objeto
se hace visible. Otros de estos dispositivos previos de ocultación pueden
causar también que aquello que esté detrás del objeto invisible (el fondo) se
desplace de forma drástica, lo cual, aunque el objeto siga siendo invisible,
deja claro para cualquier observador que allí ocurre algo raro, de manera que
difícilmente esta clase de invisibilidad serviría para esconder algo sin que
nadie se diera cuenta.
Manto de invisibilidad de Susumu Tachi, de la Universidad de Tokio.
El profesor Susumu Tachi, de
la Universidad de Tokio presentó en junio de 2004 en San Francisco, Estados Unidos, una
capa de invisibilidad humana. Su invento consiste en una prenda de camuflaje que capta con una cámara la imagen que se
encuentra a la espalda del sujeto, y que las proyecta sobre sí mismo creando el
efecto de invisibilidad. Entre los nuevos proyectos de Tachi, se encuentra
el desarrollar un sistema que permita ver a través de las paredes.
En 2005, utilizando directrices matemáticas, físicos del Reino Unido afirmaron que es posible diseñar un objeto que provoque la ilusión de
invisibilidad. Poco después, Vladimir Shalaev, de la School of Electrical and Computer
Engineering de la Universidad de Purdue, Estados Unidos, diseñó en el 2007 el prototipo de un dispositivo que usa un conjunto de agujas nanométricas
irradiantes de luz a partir de un radio central.
Espectro de luz visible por el ojo humano. Clic para ampliar la imagen.
El diseño, que se
parece a un cono, doblaría la luz alrededor del objeto encubierto. Los objetos
del entorno serían visibles, pero no el objeto rodeado por la serie cilíndrica
de nano-agujas. Este diseño permitiría refractar luz alrededor del objeto
cubierto por el “camuflaje”, hasta hacerlo invisible. Pero aún presenta una
limitación, afirma Shalaev: funciona
sólo para una única longitud de onda, y no para todas las frecuencias del
espectro visible.
Se ha calculado que
este sistema, tal como explican los ingenieros, funciona con una longitud de onda de 632,8 nanómetros, que se
corresponde con el color rojo, pero este mismo diseño podría aplicarse en
breve para cualquier otra frecuencia de onda única del espectro visible. En
principio, este camuflaje podría ocultar algo tan grande como una persona o un
avión. El desafío ahora consistiría en generar un
diseño que funcione para todos los colores de la luz visible, pero al mismo
tiempo. Los científicos
señalan que es un desafío tecnológico que puede lograrse en cierto tiempo.
La invisibilidad en pocas palabras
Para conseguir que
una “cosa” se vuelva invisible se
necesita, por un lado, que el objeto no refleje luz hacia fuera y, por otro,
que la luz sea reflectada alrededor del objeto, de manera que cuando lo
miramos veamos sólo el fondo y no el objeto en sí.
Dibujo de un objeto sometido a la invisibilidad.
Satisfaciendo sólo
el primer requisito se consigue ver la forma del objeto como si fuera una
sombra, por lo que se piensa que puede haber algo “ahí”. Pero el segundo
requisito es el más difícil, porque se
debe conseguir que el ojo pueda ver el fondo sobre el que está situado el
objeto, pero no el objeto camuflado. Sería como ver a través de él.
Todo objeto sólido
refleja la radiación que recibe, desde las microondas hasta la luz visible. Es
esta reflexión la que permite que los objetos sean vistos. Para poder volver invisible
un objeto y además dejar intacto el aspecto de todo lo que tenga detrás, los
investigadores buscaron una acertada combinación entre tipos muy concretos de
lentes, cada una con la intensidad precisa en la clase de
distorsión óptica que ejerce, así como las distancias exactas para separar las
cuatro lentes que integran la lente compuesta.
La lente de invisibilidad oculta parte de la mano y deja ver lo que hay detrás de ella.
Es
factible fabricar en tamaños mayores esta lente de invisibilidad. El único límite de tamaño máximo es el
mismo al que se enfrenta cualquier otra lente. Esto significa que es viable
hacer invisibles objetos bastantes grandes.
Las
aplicaciones potenciales de esta lente de invisibilidad son innumerables, y van
mucho más allá de los usos obvios en el campo del espionaje. Por ejemplo, los cirujanos durante una intervención
quirúrgica a menudo desearían ver parcelas de tejido que inevitablemente su
mano tapa al operar. Interponiendo la lente entre sus ojos y sus manos, estas
se volverían invisibles y podrían operar y al mismo tiempo ver a través de sus
manos.
El concepto de la invisibilidad tiene miles
de años
Muchos mitos y
leyendas de diferentes culturas relatan historias de dioses y héroes que se
hacían invisibles por medio de algún objeto mágico. Así, por ejemplo, los griegos citan el casco del dios Hades
(Plutón para los romanos), que hacía invisible
a quien lo llevara. Este casco era un regalo de los Cíclopes, antigua raza
de gigantes. El héroe Perseo lo utilizó para escapar de las dos hermanas de Medusa a la cual le cortó la
cabeza.
El casco de Hades, regalo de los gigantes cíclopes, hacía invisible al que se lo pusiera.
En la mitología
céltica de Irlanda está el dios Angus, deidad del amor, hijo de Dagda, el
dios que posee un caldero cuyo contenido es inagotable. Angus posee un manto de invisibilidad con el que envuelve a quienes
quiere proteger.
En la mitología
germánica tenemos a Siegfried o Sigurd
que le arrebató la capa de invisibilidad (Tarnkappe), al enano Alberich,
tras haberlo vencido junto a sus aliados, doce gigantes. Siegfried luego ayuda
al rey Gunther con la capa que lo hace invisible.
Sigfrido contra el dragón. Tenía una capa que le otorgaba la invisibilidad.
Cabe la posibilidad
que el casco de Hades y los mantos invisibilizadores celtas y germánicos fueran
artilugios heredados por avanzadas
civilizaciones hace miles de años de las cuales no queda ni el recuerdo. Con lo cual, la
ciencia actual no estaría sino reinventando algo que existió hace milenios.
La novela El Hombre invisible de H. G. Wells.
La literatura de
ciencia-ficción retomó estos conceptos, Herbert
George Wells publicó en 1897 su famosa novela de un científico que inventa
una droga que le otorga la invisibilidad, que en 1933 fue llevada al cine por
primera vez. El hombre Invisible,
ha tenido secuelas y numerosas imitaciones, tanto en cine como en televisión, la última versión cinematográfica es la del
director Paul VerhoevenEl hombre sin sombra, en el año 2000.
Otra variante
desarrollada en el cine, es cuando una
civilización posee una tecnología superior que posibilita un camuflaje o
invisibilidad a su poseedor como en el caso de los alienígenas cazadores de
la saga Depredador, o de las naves intergalácticas en la serie Viaje a las Estrellas.
El Anillo único forjado en Mordor, según escribió Tolkien.
John Ronald Reuel Tolkien inspirado en las mitologías antiguas
retomó el concepto de la invisibilidad, en este caso con dos objetos en su
trilogía de El señor de los anillos. En primer lugar, el héroe Frodo,
logra la invisibilidad
por medio de un poderoso anillo, pero está bajo la mirada del malvado Sauron. El otro objeto, es una capa de invisibilidad que le regalaron los
elfos. Cuando Frodo llega a Mordor, se tapa con dicha capa invisible que evita
que los orcos y Sauron lo vean.
Harry Potter recibe la capa de invisibilidad.
Joanne Rowlings imaginatambién una capa mágica para Harry Potter, regalo del padre del joven mago. Harry
la utiliza en situaciones comprometidas, como deambular de noche por el
colegio, conseguir información prohibida o librarse de peligros.
El doctor escocés Ulf Leonhardt analizó otra variante,
sacada de las historietas de la editorial Marvel. En ellas, la Mujer invisible, integrante de Los
cuatro Fantásticos, logra la invisibilidad dirigiendo la luz de su alrededor
usando un campo de fuerza y, según el científico, eso es lo más cercano que se
podría lograr en el futuro. Y es que la invisibilidad es la ilusión óptica
de que la persona no está ahí. Es por eso que Leonhardt utiliza el ejemplo del
agua que circula alrededor de una piedra. El agua fluye por la piedra, se
arremolina en torno a ella y luego se marcha como si nada hubiera estado ahí.
Sue Storm, la Mujer Invisible de Los 4 Fantásticos, personajes creados por Stan Lee.
Si se sustituye el
agua por luz, no se puede ver que había algo porque la luz es guiada alrededor
de la persona o el objeto. Se vería la luz de la escena detrás del objeto, como
si no hubiera nada delante. Leonhardt publicó su estudio en el New Journal of Physics,
donde explica que la Mujer Invisible lo que hace es curvar
el espacio alrededor suyo para curvar la luz. Lo que harían los dispositivos
sería imitar ese espacio curvado.
Según los científicos de la Universidad de
Rochester, otra aplicación práctica de la lente de invisibilidad sería para los
camioneros. La visibilidad desde la cabina de un camión ha sido
tradicionalmente bastante peor que la que se disfruta desde la cabina de un
automóvil. Instalando varias lentes de
invisibilidad en los puntos adecuados, los camioneros podrían ver a través de
algunos tramos de la cabina del camión, eludiendo así los puntos ciegos de
esta.
En síntesis, los
investigadores dicen que la nueva lente tiene el potencial de ocultar objetos de cualquier tamaño, como
aviones, o incluso edificios. Pero reconocen que para que ello ocurra se
tendrán que realizar muchos experimentos, porque aún les queda un largo camino
por recorrer.
Vea
la explicación sobre la lente creada en la Universidad de Rochester: The Rochester Cloak
Mediante
el Google Earth se descubrieron en el norte de Kazajistán más de 50 formaciones
artificiales de variado diseño y tamaños, incluida una extraña cruz de tres
puntas de origen desconocido.
Una cruz solo visible desde el aire, en el norte de Kazajistán.
Estos dibujos en el Asia central, presentan diferentes formas geométricas, como anillos, cuadrados y
cruces.
Respecto a su tamaño, algunos
superan el de un portaaviones moderno y otros tienen de 90 a 400 metros de
diámetro, informa el portal Bnews.
Un geoglifo kazajo con forma de cuadrado se puede observar perfectamente.
Los investigadores de la Universidad Kostanay de Kazajistán, en colaboración con la Universidad de Vilna, Lituania, han
examinando los geoglifos, pero por el momento no han podido determinar su función
ni datar exactamente su antigüedad.
La arqueóloga Irina Shevnina.
El equipo, que está llevando a cabo diferentes estudios de la
zona como, excavaciones arqueológicas,
estudios de radar de penetración de suelos y fotografías aéreas, recientemente
presentó sus resultados iniciales en la reunión anual de la Asociación Europea
de Arqueólogos en Estambul.
"Hoy en día, solo estamos seguros de una cosa: los geoglifos fueron realizados por un
pueblo antiguo. Quiénes y con qué propósito lo hicieron sigue siendo un
misterio", dijeron los arqueólogos
Irina Shevnina y Andrew Logvin, de la Universidad de
Kostanay.
Esta cruz en Kazajistán con algo de parecido a una esvástica mide 460 metros.
Muchas de las figuras fueron hechas con montículos de tierra, pero la cruz parecida
a una esvástica fue realizada utilizando madera, mide 460 metros.
Se estima que pueden
datar del 2.000 antes de Cristo y tal vez pueden llegar a tener 10.000 años de
antigüedad. Se especula que fueron hechos con fines rituales. Los diseños son
difíciles distinguirlos en la tierra, pero pueden
verse fácilmente desde el aire.
Otros
geoglifos en el país
En el año 2009 fueron descubiertos otros extraños
símbolos en Kazajistán, en esa oportunidad se informó el descubrimiento de una
figura humanoide encajada entre dos estructuras inusuales. Los dibujos se
encuentran en las remotas montañas
Karatau en el sur de Kazajstán.
Figura humanoide descubierta en Karatau, el sur de Kazajistán en el año 2009.
Los habitantes que desconocían estas líneas
hasta que se vieron desde el aire opinan que podrían ser mensajes o marcadores
creados por los pueblos antiguos, en beneficio de los visitantes
extraterrestres. Otra teoría propuesta por algunos ovnílogos supone que podrían representar la interacción entre
los dioses de las estrellas y la civilización dominante en aquel momento.
Kazajistán ha estado habitado
desde elNeolítico: el
clima y el terreno de la región son los más adecuados para la práctica del
pastoreo por parte de losnómadas.
Los arqueólogos creen que los primeros
seres humanos domesticaron el caballoen
las vastas estepas de la región.
El 26 de septiembre de 1983, durante la Guerra Fría se produjo el
llamado Incidente del Equinoccio de Otoño, que colocaría al mundo a escasos
segundos de un apocalipsis atómico.
Stanislav Petrov con una mezcla de intuición, frialdad, sensatez, cálculo y buena suerte, salvó al planeta de la destrucción nuclear.
Hace 31 años en un día como hoy, pudo estallar una
guerra nuclear si Stanislav Petrov
hubiera interpretado que la Unión Soviética estaba siendo atacada por los
Estados Unidos. Posiblemente gracias a él todos nos hemos salvado de ser
meros sobrevivientes en un mundo apocalíptico, que hubiera sido completamente
distinto del presente. El acto que
realizó Stanislav Petrov —una mezcla de intuición, frialdad, sensatez, cálculo
y buena suerte— salvó el planeta de la destrucción nuclear, aunque él esté muy
lejos de ser considerado un héroe. De hecho, no recibió ninguna medalla ni
premio honorífico o económico de su país, sino más bien una reprimenda de sus
superiores.
A las 00:14 hora de Moscú un satélite soviético dio
la alarma de que misiles norteamericanos
se dirigían a territorio soviético y en 20 minutos alcanzaría la URSS. En
aquel tiempo Stanislav Petrov, teniente
coronel del ejército soviético era el encargado de una estación soviética de
satélites que vigilaban a los Estados Unidos. La computadora interpretó el ataque
de 5 misiles. El protocolo para el ejército soviético habría sido tomar
represalias con un ataque nuclear. Pero el oficial de guardia Stanislav Petrov -cuyo trabajo era
registrar aparentes lanzamientos de misiles enemigos- decidió no informar a sus superiores y en su lugar los descartó como
una falsa alarma.
Mapa de la desaparecida Unión Soviética.
Esto
fue una violación de sus tareas, una
negligencia en el cumplimiento del deber. Lo más seguro habría sido pasar
la responsabilidad, referirlo a un superior. Pero su decisión puede que haya
salvado al mundo.
"Tenía todos los datos (para
sugerir que había un ataque con misiles en curso). Si hubiera enviado mi
informe a la cadena de mando, nadie habría dicho nada en contra", dijo en
una entrevista.
El héroe anónimo
Hoy su historia parece apenas una nota de alguna
efeméride en los anales de la Guerra Fría, y él es sólo un viudo de 75 años, que vive olvidado por todos, achacoso y
acompañado por su hijo y un perro en un modesto piso —su mísera pensión de
jubilado no le permite más— en un olvidado pueblo llamado Friazino, a 40
kilómetros en las afueras de Moscú.
Dibujo del derribo del avión de pasajeros coreano por parte de un caza de la URSS.
Para entender lo que Stanislav Petrov hizo hay que retroceder a los años ochenta, cuando
la Guerra Fría entre las superpotencias y sus respectivos aliados o satélites
era un constante juego de estrategias, actos de propaganda, provocaciones y
amenazas que mantenían el mundo en vilo, siempre
al borde de la catastrófica conflagración final.
Restos del avión de Korean Airlines KAL 007 derribado en setiembre de 1983 sobre la isla Moneron.
Solo tres semanas antes de que
Petrov salvara al mundo, la Unión Soviética había derribado el 1º de setiembre un avión de pasajeros surcoreano que
había invadido el espacio aéreo soviético,matando a las 269 personas a bordo, incluidos varios
estadounidenses. La OTAN pronto
comenzó el ejercicio militar "Able
Archer 83" (“Arquero capaz”), a partir del 2 de noviembre de 1983, interpretado por la KGBcomo una preparación de unPrimer
ataque.
Guerra fría.
En septiembre de 1983 la tensión era altísima y todo
parecía pender de un hilo por el derribo del avión de pasajeros. El grave incidente produjo una crisis, un
escándalo mundial e incontables teorías sobre el hecho que iban de la
conspiración más siniestra a la más inocente confusión del piloto coreano.
El habitual secreto con el que el régimen soviético manejaba estos asuntos, y
su negativa a dar explicaciones u ofrecer disculpas, hacía peores las cosas:
los nervios se crispaban y el ambiente político internacional estaba más
envenenado que de costumbre.
Foto de Stanislav Petrov en 1983.
Ése era el contexto en el que, se encontraba Stanislav Petrov, quien tenía a su
cargo una muy delicada misión: era el
comandante y el más alto responsable de un equipo de técnicos y militares
especializados que, encerrados en un búnker secreto en la noche del 26 de septiembre.
Petrov,
nacido en 1939, teniente coronel de la Fuerza Aérea Soviética, se hallaba de
guardia en el bunker Serphukov 15 de
Moscú, donde se alojaba el sistema de alerta temprana de ataques nucleares.
Sepultado bajo tierra para no ser detectado por los
sistemas de contraespionaje norteamericanos, monitoreaba, día y noche, la red de alerta temprana ante cualquier
posible ataque de misiles nucleares del enemigo.
Así se representaba el duelo silencioso entre los Estados Unidos y la URSS.
Petrov no era el prototipo del militar soviético rudo
y torpe que las películas y las novelas de espionaje solían pintar. Formaba
parte de la más escogida elite castrense: ilustrado y con buena formación,
gozaba de respeto dentro y fuera de las filas como teniente coronel, y gozaba
también, por cierto, de los privilegios y beneficios del poder. Era el hombre encargado de tomar, en
cualquier momento, una decisión suprema: la de oprimir el botón rojo que
dispararía los misiles para detener en el aire la agresión extranjera, y los
misiles de contraataque sobre suelo enemigo; es decir, en sus manos estaba el
poder de comenzar el fin del mundo. Y eso fue justamente lo que enfrentó la
histórica noche del 26 de septiembre de 1983.
Satélite espía soviético Oko.
Poco después de la medianoche, una nueva red de satélites llamada Oko ("El Ojo")
reflejó en las pantallas de Petrov y su equipo algo extraño y temible: "La
sirena aulló, pero me senté allí durante unos segundos, mirando a la pantalla roja, grande, retroiluminada con la palabra
'lanzamiento' brillando en ella", dice Petrov.
El sistema le decía que el nivel de fiabilidad de dicha descripción era el
"más alto". No podía haber
ninguna duda. Estados Unidos había lanzado un misil.
Base subterránea Serpukhov-15 en Moscú.
"Un minuto más tarde la sirena
sonó de nuevo. El segundo misil había sido lanzado. Entonces la tercera y la
cuarta y la quinta. Las computadoras cambiaron de alertas de
"lanzamiento" a "ataque con misil"", dice.
"No había ninguna regla sobre
cuánto tiempo se nos permitía pensar antes de informar de un ataque, pero sabíamos
que cada segundo de retraso se llevaba un tiempo muy valioso. El liderazgo militar y político de la Unión Soviética necesitaba ser
informado sin demora".
La computadora rusa avisaba del ataque de 5 misiles intercontinentales.
"Todo lo que tenía que hacer era alcanzar el teléfono para llamar por
la línea directa a nuestros altos mandos, pero yo no pude moverme. Me sentí como si estuviera sentado en una
sartén caliente", afirmó.
Lo que parecían cinco siluetas estaban moviéndose a
gran velocidad y altura en dirección a Moscú; segundos después los identificó
como cinco misiles Minuteman II
con cabezas nucleares. El sistema de detección estaba programado de tal
manera que, una vez confirmado el inminente ataque, Petrov estaba forzado a
respetar las precisas instrucciones de la computadora, seguir un "protocolo" de emergencia nuclear y comunicar de
inmediato la situación a sus superiores en el Kremlin; así se eliminaba toda
posibilidad de vacilaciones ni debilidades humanas. Una luz roja con las
palabras rusas equivalentes a "¡ATAQUE
CON MISILES!", titilaba en la consola frente a él: el circuito
electrónico no le dejaba otra opción que la prevista para estos casos. La
situación era todavía más dramática porque todo
el proceso, que iba de la detección del inminente peligro hasta la decisión
final de apretar el botón que desataría la represalia soviética, tenía que
cumplirse en aproximadamente doce minutos.
Principales objetivos militares en el caso de una guerra entre los Estados Unidos y Rusia.
Enfrentando
esas circunstancias tan apremiantes e irrevocables, rodeado por todo su personal en
estado de máxima alerta, pero en el
fondo solo, Petrov revisó una vez más la información que se desplegaba ante sus
ojos. Y observó algo que no le pareció acorde con la lógica ni con sus
conocimientos técnicos sobre las armas de largo alcance. Se hizo entonces una
pregunta elemental: "¿Por qué sólo
cinco misiles?" Bien sabía que, si Estados Unidos había resuelto
atacar la Unión Soviética en ese momento (y el caso del avión coreano era un
buen pretexto), disparar únicamente
cinco misiles era completamente ridículo. Su inmenso arsenal estaba concebido
para lanzar una lluvia, una espesa oleada de centenares, quizá miles, de
misiles para desarticular por completo al enemigo y superar sus defensas
antiaéreas con la simple fuerza del exceso (overkill se llamaba esa
fuerza abrumadora de las armas), sin importar si eso producía una victoria o el
apocalipsis. Esa deducción le bastó a Stanislav
Petrov para tomar una decisión. Petrov
llamó al oficial de guardia en el cuartel general del ejército soviético y reportó
una falla en el sistema.
Imagen de una explosión nuclear.
Si se
equivocaba, las primeras explosiones nucleares habrían ocurrido minutos más
tarde. "Veintitrés minutos más
tarde me di cuenta de que no había pasado nada”, dijo aliviado.Se trataba de una falsa alarma: nada más.
Petrov
consideró que podría tratarse de una falsa alarma, pues un eventual ataque se
haría con decenas de estas armas. En los minutos siguientes se detectaron otros
cuatro misiles, sin embargo Petrov mantuvo su convicción de que se trataba de
un error. El ataque nunca llegó. Si
Petrov hubiera actuado de modo contrario, la URSS hubiera sido la potencia
agresora lanzando un ataque nuclear por sorpresa a los Estados Unidos y estos a
su vez hubieran respondido con todo el arsenal del que disponían.
Stanislav Petrov en la actualidad, en su modesto departamento en el pueblo de Friazino a 40 kilómetros de Moscú.
Lo asombroso es que Petrov adoptó esa posición sin
estar absolutamente seguro de que no se estaba equivocando. Era más bien una
especie de apuesta de que lo contrario —que se trataba de un ataque verdadero—
era algo irracional, insostenible, ajeno a las reglas presentes de la guerra. Y
lo hizo sabiendo que, si cometía un
error, sería juzgado y ejecutado como un despreciable traidor a la sagrada
patria rusa y al no menos sagrado Partido Comunista, o a lo que sobreviviera de
ellos después de la hecatombe. Petrov sólo tenía
que comunicar que estaban siendo atacados para desencadenar la respuesta
nuclear soviética. Y no lo hizo.
Misil Minuteman II en su silo nuclear.
Dice que era el único
oficial de su equipo que había recibido una educación civil. "Mis
compañeros eran soldados profesionales, se les enseñó a dar y obedecer
órdenes", contó.
Por lo tanto, en su opinión, si hubiera estado otro militar en su turno, la alarma se habría lanzado
y hubiera llegado hasta el Premier Yuri Andropov en cuestión de pocos minutos.
Base Malmstrom de la Fuerza Aérea de Estados Unidos en Montana.
Felizmente para él, y para todos nosotros, Petrov no se equivocó al negarse a aceptar
los indicios que le presentaba "El Ojo" como algo irrefutable
—ahora tiende a ser una actitud normal la basada en la noción de que la
inteligencia artificial es infalible, al revés de la humana. En efecto, los cinco sospechosos puntos que aparecían
en la pantalla de Petrov no eran producto de la combustión de los motores de
presuntos misiles, sino —aunque parezca increíble— simple reflejo de los rayos
solares sobre las nubes que cubrían en ese momento los silos de los Minuteman
en la base de Malmstrom,
Montana. Ésa fue la conclusión a la que llegó una comisión militar que investigó el
incidente; Petrov luego sirvió en otro puesto de menor jerarquía hasta 1993, el año en el que se retiró, sin pena ni gloria, de las
fuerzas armadas, donde sirvió desde 1958. Los soviéticos le obligaron a retirarse
anticipadamente por no haber seguido el protocolo y decidieron ocultar el
incidente. Tras lo cual tuvo que trabajar como guardia de seguridad para poder
subsistir en la nueva Rusia, donde ha pasado al desván de las ruinas del
período soviético.
En 1998 se comenzó a difundir este incidente
El informe sobre el Caso Petrov permaneció en absoluto secretohasta 1998, cuandouno de
los oficiales bajo el mando de Petrov que fue testigo de la situación publicó
un libro donde contaba la singular anécdota.
Stanislav Petrov en su hogar, muestra el premio World Citizen Award.
Su esposa estuvo quince años sin saber nada del
asunto. Cuando conoció la historia le preguntó: ‘¿Pero qué hiciste?’, a lo que
él respondió: “No hice nada“.
Años más tarde, el 21 de mayo de 2004, a Petrov le
fue concedido el premio World Citizen
Award de lasNaciones Unidas.
En enero de 2006, Petrov realizó un viaje a Estados Unidos, donde
fue homenajeado por las Naciones Unidas,
y donde posteriormente le fue entregado
un segundo premio de la Asociación de Ciudadanos del Mundo.
Petrov recibe en 2013 el Premio de la Paz en la ciudad alemana de Dresde.
En el documental “The Red Button & The Man Who
Saved The World” (“El botón rojo
y el hombre que salvó el mundo”, 2008) Petrov afirma: “Estaba simplemente haciendo mi trabajo y fui la persona correcta en el
momento apropiado, eso es todo“.
En sus propias palabras: “No se puede empezar una
guerra nuclear con sólo cinco misiles”.
Otra de sus frases es la
siguiente:"Ese era mi
trabajo", dice. "Pero el mundo tuvo la suerte de que fuera yo el del turno de la noche".
En 2013 Petrov, al cumplirse 30 años de su actitud, recibió el Premio de la Paz en
Dresde, Alemania con un premio en efectivo de 32.000 dólares.
Esta historia tiene un significado muy aleccionador en
nuestros días, en los que hemos dejado atrás los hábitos de la Guerra Fría por
los de la "guerra
antiterrorista" que manipula los hechos haciendo creer al mundo que hay
que bombardear todos los países que le molestan a Israel y los Estados Unidos,
creando un peligro cierto y brutal, pero que al mismo tiempo ha creado un estado de histeria general que perdura desde
los autoatentados de falsa bandera del 11 de septiembre de 2001.
Nos han acostumbrado con que hay que bombardear a todos los países que le molestan a Israel y los Estados Unidos.
Nos han acostumbrado a aceptar que a todos nos
observan constantemente una serie de complejos sistemas electrónicos y cuerpos
especializados, que dependen de esa información para protegernos y para actuar
de inmediato; es decir, todos somos
potencialmente sospechosos para no ser todos víctimas, diferencia que realmente
no siempre controlamos, porque otros son los encargados de hacer la distinción
entre apresarnos o protegernos con sus equipos de alta precisión. Si
alguien comete un error, si un mecanismo electrónico falla y da una falsa
alarma que dispara la esperada y salvadora respuesta automática, ¿habrá siempre por allí un Petrov con su
providencial duda, con su misma cabeza fría? Estamos, en verdad, siempre al
borde del abismo, envueltos en una guerra en la que se nos ha reclutado, lo
queramos o no. Hay algo aterrador en ello, porque cualquier estúpido
sentado delante de una computadora puede apretar un botón y destruir al mundo.
¿Qué pasaría si alguien dispara misiles nucleares y luego se descubriese que fue un error de detección?
¿Qué pasaría si alguien dispara misiles nucleares y
luego se descubriese que fue un error de detección, como el que frenó Petrov? Si Petrov hubiera considerado correctas las
detecciones, se hubiera desencadenado un ataque soviético contra Estados Unidos
iniciando la guerra nuclear. Pero con su acción o mejor dicho, su no acción, Petrov nos salvó de una
segura guerra nuclear. Su prudencia salvo
al mundo y debemos estarle eternamente agradecidos.
La sonda india
Mangalyaan ingresó con éxito en órbita alrededor del Planeta Rojo después de
300 días de viaje desde la Tierra recorriendo 670 millones de kilómetros. India se
convierte así en el único país asiático en conseguirlo y en la primera
potencia del mundo en lograrlo en sólo un intento.
La sonda india Mangalyaan que quedó orbitando el planeta Marte el 24 de setiembre.
Ayer,
la sonda Mangalyaan
llegó al planeta rojo después de una serie de maniobras que duraron 24 minutos.
Tras despedirse de sus motores, consiguió reducir su velocidad de 22 kilómetros
por segundo a 4,2. Es la velocidad que el satélite necesitaba para quedar
atrapado en la gravedad del planeta. La operación era complicada porque un
exceso de freno o un déficit podrían haber dejado al satélite a la deriva en el
espacio exterior o haberlo estrellado contra el suelo marciano. No obstante,
tras un momento de tensión, los
científicos del centro de control de la misión celebraron el éxito de la sonda
al recuperar la comunicación con la nave no tripulada, cuyo nombre oficial es Mision Mars Orbiter
(MOM).
Científicas e ingenieras indias celebran la llegada de la misión Mangalyaan a Marte.
Es la
primera vez que el viaje inaugural de un país al planeta rojo culmina
exitosamente, además de ser el más barato, a un costo de US$75 millones.
El
personal de control de la Agencia India
de Investigación Espacial en Bangalore estalló en aplausos y gestos de
alegría después de frenar el principal motor de la sonda Mangalyaan, tras un viaje de diez meses desde la
Tierra.
El Primer Ministro Narendra Modi celebra la exitosa misión en el centro espacial (ISRO) en la ciudad de Bangalore.
El
primer ministro indio, Narendra Modi,
estuvo allí. Modi tiene planes de expandir el programa espacial de su país con
infraestructura y tecnología mejoradas.
El
primer ministro de India, Narendra
Modi, como testigo de la operación en el centro de la ciudad de
Bangalore, fue el primero en felicitar a los profesionales de la Organización
India de Investigación Espacial (ISRO) al haber
conseguido algo “casi imposible”. “Las
probabilidades estaban contra nosotros. De
51 misiones que se intentaron en el mundo sólo 21 han tenido éxito. Hemos
prevalecido”, dijo ante un público orgulloso de su hazaña. “Cuando nuestros
jugadores de cricket ganan un torneo, lo celebramos a lo grande. Lo que estos científicos han
conseguido es mil veces más grande“, añadió el primer ministro.
Puerto espacial indio de Sriharikota, en la bahía de Bengala.
La
Agencia Espacial estadounidense felicitó a sus colegas indios a través de la
red social Twitter. “¡Felicitamos al
ISRO por su llegada a Marte! MarsOrbiter se une a las misiones que estudian el
planeta rojo”, rezaba el mensaje publicado.
La sonda Mangalyaan antes de viajar a Marte.
La Mangalyaan llegó a su destino después de 300 días de viaje desde la Tierra y con
670 millones de kilómetros a sus espaldas. Fue lanzada el 5 de noviembre del año pasado desde el puerto espacial de Sriharikota, en la bahía de
Bengala.
Escapó de la atracción de la gravedad de la tierra un mes después, el 1 de
diciembre. Estudiará la superficie, topografía y atmósfera y se centrará en la
búsqueda de metano.
La Magalyann es la misión a Marte más económica de la historia. Clic para ampliar.
India
ha invertido 57,5 millones
de euros en esta misión que equivalen a menos de 75 millones de
dólares. Es, en palabras del presidente de ISRO, K. Radhakrishnan, “la misión
interplanetaria más barata del mundo”.
El
gigante asiático concede gran importancia a su programa espacial, con el que
trata de ganarse una posición internacional privilegiada, si bien su
presupuesto es más limitado que el de sus competidores. Frente a los 1.000
millones de dólares de ISRO, Estados
Unidos destina 17.600 millones a la NASA, mientras que la Agencia Espacial Europeacuenta con más de 5.000 millones. ISRO,
que en 2008 lanzó su primera sonda lunar, ha realizado más de 100 misiones en
más de cincuenta años
El cohete indio que llevó la sonda hasta el espacio exterior.
India
se suma así a las grandes potencias que han logrado alcanzar el Planeta rojo. Estados Unidos, la Agencia Espacial
Europea y Rusia han colocado satélites en la órbita de Marte,
pero nunca en el primer intento.
En las próximas semanas, la nave espacial será probada a fondo en la órbita de Marte con una
observación sistemática posterior del planeta rojo usando sus cinco
instrumentos científicos.
El lunes llegó la sonda Maven
En la órbita de Marte ya convivían naves no tripuladas de EEUU, la
Agencia Espacial Europea y Rusia. El orbitadorMangalyaanañade así a la India al
club de las grandes potencias que han
logrado alcanzar el Planeta rojo.
La sonda Maven, de la Nasa, llegó el 22 de setiembre para estudiar las capas altas de la atmósfera marciana.
El lunes,
la sonda Maven (acrónimo de Mars Atmosphere an Volatile Evolution) completó con
éxito el proceso de frenado con sus seis retrocohetes. Durante 33 minutos los
cohetes frenaron el satélite hasta que quedó atrapado por la gravedad de Marte
en la órbita adecuada. Tras diez meses de viaje y más de 700 millones de
kilómetros, Maven podrá iniciar la recopilación de datos más exactos sobre
la composición de la atmósfera marciana o el ritmo al que el planeta pierde
ciertos gases en el espacio, debido a que no tiene la protección de un campo
electromagnético como la tierra.
Línea de tiempo de la sonda Maven. Clic para ampliar la imagen.
De este
modo, los científicos podrán conocer si Marte, como se cree, era un planeta
repleto de océanos que fue perdiendo el agua por la acción constante de los
vientos solares y la carencia de un campo electromagnético. La sonda
Maven ayudará a conocer mejor las capas altas de la atmósfera marciana y
como funciona la ionosfera del planeta y el efecto que tiene el viento solar.
Representación artística de Mangalyaan en órbita marciana.
En
Asia, hasta ahora, nadie había conseguido llegar a Marte. La primera misión
china con destino a Marte, Yinghuo-1, no
logró su objetivo en 2011, como tampoco lo consiguió la misión japonesa Nozomi que se perdió en el espacio tras
lanzarse en 1998.
Mangalyaan
ha empezado a tomar fotografías del planeta rojo y a estudiar su atmósfera. Su
objetivo es analizar las condiciones de Marte y, sobre todo, detectar la existencia de metano en el
aire, lo que podría indicar una actividad biológica. La nave quiere
recopilar datos suficientes para comprender cómo funciona el clima marciano y
tratará de determinar lo sucedido con el agua que se cree que existió en su
suelo. ISRO espera que su satélite dé la vuelta al planeta durante al menos
seis meses.
Primera imagen de la superficie marciana enviada por la sonda india.
Mangalyaan, formalmente llamada Misión Orbitadora de Marte, está
equipada con un instrumento que intentará medir el metano en la atmósfera. La
atmósfera de la Tierra contiene miles de millones de toneladas de metano, la
inmensa mayoría provienen de microbios como los organismos que viven en el
tracto digestivo de animales.
Se ha
especulado con que algunas bacterias
productoras de metano podrían existir en Marte bajo la superficie, protegidos
de las duras condiciones atmosféricas.
Critican la expedición a Marte
El
escritor indio Pallava Bagla declaró
a la BBC, criticando el proyecto como el
"sueño engañoso" de un país que busca un estatus de superpotencia
mientras 400 millones de indios aún viven sin electricidad y 600 millones no
tienen acceso a baños.
El Director de la Organización India de Investigación Espacial (ISRO), K. Radhakrishnan señaló que el programa espacial indio requiere 1.000 millones de dólares, el 0,34% de los gastos del gobierno central y el viaje a Marte solo el 0,8 por ciento.
Muchos
asumen que la actividad especial es una
especie de juguete que es mejor dejar en manos de los países ricos, que no
tiene valor para las naciones en vías de desarrollo.
El director de la Organización
India de Investigación Espacial (ISRO, por sus siglas en inglés), K.
Radhakrishnan, le dijo a la BBC que "el
objetivo principal es demostrar la capacidad de India para alcanzar la órbita
de Marte y después realizar algunos experimentos científicos
significativos".
Centro de Control de Misiones en la ciudad de Bangalore, India.
"Se
trata de encontrar soluciones a los problemas del hombre y la sociedad",
se defiende Radhakrishnan, quien señala que el programa espacial del país requiere de US$1.000 millones, el 0,34%
de los gastos del gobierno central, la mayoría destinados a la construcción de
satélites de comunicación. Y la misión a
Marte, explica, constituye el 0,8% de ese porcentaje.
"Si
nos fijamos en los beneficios que el país ha acumulado a lo largo de los años
–agrega–, se ha superado el dinero que se ha gastado en términos de beneficios
tangibles e intangibles". Acto seguido recuerda las ventajas para pescadores, campesinos, y órganos de
gobierno como aquellos dedicados a la gestión de desastres, que se benefician
de los satélites.