El 21 de mayo de 2013, el 80 por
ciento de los habitantes de esta ciudad de Oregón rechazaron por cuarta vez en
su historia la propuesta de añadirle flúor a la red de agua potable.
En la ciudad de Portland nunca han logrado añadirle flúor a la red de agua potable. |
Los residentes de
Portland, Oregón, Estados Unidos votaron en un referéndum contra un
proyecto para añadir fluoruro a su agua potable. Con el 80 por ciento de los votos contra el flúor, el alcalde Charlie Hales, “admitió su derrota”, informó la agencia
de noticias Associated Press.
Portland es la ciudad más grande de EE.UU que nunca ha
añadido fluoruro en el agua, ni tiene planes de hacerlo, informó
Associated Press. En el pasado, los ciudadanos de Portland han vencido a otros tres intentos de agregar fluoruro a su agua desde
1956, cuando se hizo el primer intento que se rechazó en un porcentaje de 60
contra 40 a favor, según informa el diario The Oregonian.
Un votante anti-flúor de Portland, Oregón. |
Los habitantes de la ciudad de Portland tuvieron que volver a luchar en 1962, cuando rechazaron otro
intento de las multinacionales para fluorar el agua de la ciudad. En 1978
volvió con fuerza otro plan de fluoración del agua corriente. Los vecinos lo
rechazaron en una gran votación realizada dos años después.
En los Estados Unidos 196 millones de personas son obligadas a beber agua fluorada. |
En setiembre de 2012 se armó un poderoso lobby de
médicos y empresarios que querían a toda costa ponerle el tóxico flúor al agua.
Contaban con cinco concejales de la ciudad que habían votado una propuesta para
fluorar con 0,7 partes por millón, el agua de la ciudad y comenzaría en
marzo de 2014. La arbitraria decisión no solo afectaría a Portland sino a otras
19 ciudades, entre ellas Gresham, Tigard y Tualatin, unas 900.000 personas en total.
Además, se trató de convencer a la población que todo ya estaba aprobado y no se podía hacer nada para revertirlo. Eso generó una
inmediata respuesta de rechazo, porque los
habitantes sabían que el objetivo final era enfermarlos. Finalmente, en una
tumultuosa votación el 21 de mayo de 2013, los vecinos lograron triunfar una
vez más, rechazando la fluoración del agua por un 80 por ciento de votos.
A la izquierda un cartel a favor de envenenar el agua y a la derecha el del rechazo al proyecto de fluorar el agua de Portland. |
En los Estados
Unidos, 196 millones de personas tienen
el agua potable fluorada, según Los Centros para el Control y la
Prevención de Enfermedades de los EE.UU. Todos tienen ya sea agua fluorizada o
agua que de forma natural o artificial contiene fluoruro en niveles superiores
de lo recomendado. El agua de Portland tiene fluoruro natural, pero no tanto
como para hacer una diferencia en la salud dental.
En Portland, los
que estaban a favor, decían que poner fluoruro en el agua potable tiene los
químicos de protección para los niños de bajos recursos, quienes no pueden
tener acceso a las visitas regulares al dentista. Los opositores agrupados en Clean Water Portland (Agua limpia para
Portland) dicen que el fluoruro daña el
medio ambiente y puede tener efectos dañinos para la salud humana.
Los volantes que se
distribuyeron a favor de la fluoración por parte del grupo Healthy Kids Healthy Portland, decían que el
21% de los niños de la ciudad tienen caries. El afiche pro flúor no aclaraba que la caries no es una enfermedad provocada por la falta de flúor, sino por
la falta de higiene.
"El agua pública se merece una votación pública", dice la pancarta. |
El debate en curso
dividió las alianzas políticas usuales en Portland, informó el diario The Oregonian. La revista Slate amplió la información sobre los
grupos a cada lado. Las organizaciones
médicas y científicas importantes apoyaban la fluorización del agua potable con
el pretexto absurdo de prevenir las caries. Los grupos opositores eran más
variados, incluyendo el Sierra Club, grupos ecologistas e incluso la oficina
local de la Asociación Nacional para el Avance de las Personas de Color (NAACP,
por sus siglas en inglés). El grupo anti-fluoración que ejercía presión
política y reclamaba un referéndum, era de producción local, informó Slate, y recibió mucha menos financiación que los oponentes a los
que derrotaron.
La victoria fue para Agua limpia para Portland, vecinos que, prácticamente sin dinero, le ganaron al poderoso grupo de médicos y empresarios que los querían envenenar. |
La primera ciudad de los Estados Unidos a la que se le añadió el tóxico
flúor al agua potable fue Grand Rapids, Michigan, el 25 de enero de 1945. Más de
200 comunidades del país han rechazado esta práctica en los últimos años.
Por cuarta vez los vecinos de Portland vencieron a quienes los querían intoxicar con flúor: 1956, 1962, 1980 y 2013. |
El fluoruro tiene efectos
inmunosupresores en dosis bajas, aumentando el riesgo de enfermedades crónicas,
incluyendo el cáncer.
El Dr. Dean Burk (1904-1988),
cofundador del Instituto Nacional de Cáncer en los Estados Unidos en 1937 y
director del departamento de cito química de la misma institución por más de 30
años. En una entrevista grabada, en 1974, por la televisión holandesa, él se
refiere a un estudio, donde compara la tasa de mortalidad de las 10 ciudades más
grandes de Estados Unidos de aguas con fluoración y las otras 10 ciudades sin
fluoración. Lo que se encontró es que en
las ciudades con fluoración las muertes por cáncer ascendían a 10 mil personas más
cada año que en las que no tenían fluoración.
El Dr. Dean Burk afirmó: "El proceso de fluoración del agua potable equivale a un asesinato público a gran escala". |
El Dr. Burk invocó la ley federal conocida como la Enmienda de Delaney que dice que “todo lo encontrado que induzca al
cáncer en hombres o animales no puede ser legalmente puesto en la comida o en
la bebida de hombres o animales de los Estados Unidos”.
Concluye Burk que “el proceso de
fluoración del agua potable de las personas equivale a un asesinato público a
gran escala, es un delito público”.
Por Alberto Seoane
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