HUMANIDAD Y COSMOS es un programa que trata de traerle a usted eso que siempre se preguntó y nunca tuvo la oportunidad de escuchar… Hechos históricos ocultados, fenómenos insólitos, creencias, mitos y leyendas, arqueología proscripta, seres extraños, energías prohibidas, noticias curiosas, científicos censurados, el misterio de los objetos voladores no identificados, profecías y vaticinios, sociedades secretas, ecología, enigmas y soluciones para vivir física y espiritualmente sanos.


lunes, 13 de julio de 2015

“LO MÁS VALIOSO EN ESTA VIDA NO ES EL DINERO SINO EL TIEMPO LIBRE”, AFIRMA ÁLVARO NEIL, EL BICICLOWN

Nacido en Oviedo, Asturias, España, decidió ver el mundo por sus propios ojos montado en una bicicleta que pesa más de 60 kilos. Ya recorrió África, Asia, Oceanía y casi toda América desde Alaska hasta la Argentina. Tiene escritos cinco libros y lleva casi once años pedaleando y al llegar a Rosario ya tiene recorridos 145.780 kilómetros y visitó 82 países.

El biciclown en Laos en 2010.
Hacer clic para ampliar la foto.
Estando en la Argentina, con 48 años de edad, y en ocasión de pasar por la ciudad de Rosario, el viernes 10 de julio de 2015, Álvaro, acompañado por Horacio Castaño, presidente del Centro Asturiano de Rosario y por la reconocida peluquera Cristina Burgués, visitó el estudio de Radio Libertad para ser entrevistado en el programa Contacto con la Creación en su emisión número 467 conducido por Carlos Avellaneda, Alberto Seoane y Daniel Verón.

Explicó a toda la audiencia lo siguiente “soy abogado, tenía un trabajo en una escribanía, donde trabajé cinco años haciendo testamentos, herencias, compraventas, etcétera, y me parecía que la vida podía ser algo más que trabajar once meses al año y tener uno de vacaciones. Yo no entiendo porque eso es así. No sé porque nos creemos que eso tiene que ser así. Eso te permite ganar bastante dinero pero te quita tiempo. En realidad lo más valioso en esta vida no es el dinero, sino el tiempo. El tiempo es lo único que estás gastando mientras respiras. Así que pensé y si trabajara menos y disfrutara más de mí tiempo libre. Y llegué a tomar la decisión de no trabajar más y disfruto ciento por ciento de mi tiempo libre”.

Programa radial Contacto con la Creación: De
izquierda a derecha, Alberto Seoane, Álvaro,
Carlos Avellaneda y Daniel Verón.
Álvaro Neil continuó “yo no vine a este mundo a trabajar, vine para ser feliz. En realidad esto no es cierto, porque yo trabajo, pero trabajo en mi sueño que es recorrer el mundo en bicicleta. Ese es mi trabajo, un trabajo por el que nadie me paga, y me ocupa muchas horas pedaleando con lluvia, contra el viento, defendiéndome de los camiones que me tiran de la carretera como me ocurrió viniendo desde Pergamino hasta aquí. Pero eso es mi pasión. La gente debería preguntarse, para saber si su trabajo vale la pena ¿trabajarían si no les pagaran? Es más, ¿pondrían su dinero en ese empleo? Si la respuesta es sí, es que ese trabajo es su pasión. Si la respuesta es no, mejor que lo dejen”.

El Biciclown entrevistado en El Salvador.
-Está hecho un filósofo de tanto pedalear-, dijo Alberto Seoane (risas). “Es que me han hecho muchas entrevistas, yo salí de España convertido en un viajero y me he convertido en un nómada. Alguien que construye su nido en cada curva del camino. He dormido en los lugares más impensables y me he convertido en un ave migratoria. Viajar se ha convertido en mi modo de vida”, expresó Álvaro.

El primer viaje del Biciclown
“El 8 de octubre de 2001 yo aterricé en La Paz, Bolivia y empecé a recorrer América del Sur, bajé hasta Argentina, me agarró el “Corralito” en Bahía Blanca, el 19 de diciembre de 2001. Llegué a Ushuaia, Tierra del Fuego en febrero de 2002, subí por Chile, Perú, Ecuador, Venezuela, Brasil, Paraguay y Uruguay", dijo el oventense.

Álvaro Neil, el Biciclown, entrevistado dos
veces en diario de Cuenca, Ecuador, en
2002 y 2014.
"Después de 32.000 kilómetros en bicicleta y 50 espectáculos de clown gratuitos solo para la gente más humilde, regresé a España, vi a mi familia, a mi novia, ahora ex novia, y cuando me preguntaron ¿ahora qué vas a hacer? Y les respondí que ahora quiero dar la vuelta al mundo”, prosiguió. 

El Biciclown actuando en Katmandú, Nepal.
Respecto al apellido que utiliza, Álvaro explicó que es de fantasía, “cuando nací me llamaron Álvaro Anselmo De la Rubia Gómez Morán. Anselmo es el segundo nombre de un abuelo que yo no conocí, y no me gusta ese nombre, así que decidí despojarme de él. Un amigo de la universidad me llamaba en broma ‘Al Varonil’, y al final terminé adoptando el ‘Nil´ como segundo nombre, escrito Neal que se pronuncia ‘nil´, y la gente piensa que soy irlandés.

Álvaro, comentando a Carlos Avellaneda y
Daniel Verón sus 145.780 kilómetros
recorridos hasta el momento.
“Yo no me disfrazo de payaso. La gente se disfraza en Carnaval. El policía no se disfraza, el policía tiene su uniforme. El payaso es mi uniforme de trabajo. Es mi traje. Además, yo no cobro con mis espectáculos que son gratuitos. Es mi regalo para el mundo. Yo me financio con mis libros, con mis documentales, con mis charlas que doy en ocasiones y con artículos que escribo en alguna revista. Yo vivo con unos 3.000 pesos por mes (220 dólares). Ese es mi salario más o menos”, reveló.

La vuelta al mundo
El biciclown salió de Oviedo, España, el 19 de noviembre de 2004 a las diez de la mañana, desde la plaza de la Catedral y marchó hacia el sur, pasó por Gibraltar y desde entonces sigue pedaleando.

El Biciclown viajando por Malawi en 2006.
“Entré a África por Marruecos, en diciembre de 2004, pasé por Mauritania, Senegal, Gambia, Guinea-Bissau, Guinea, Malí, Níger, Burkina Faso, Benín, Nigeria, Camerún, Gabón, Congo, República Democrática del Congo, Angola, Namibia, y en el 2006 ya estaba en Sudáfrica. Siguió Lesoto, Suazilandia, Mozambique, Malawi, Zimbabue, Tanzania, Ruanda, Uganda y en Kenia ya era el 2007. Vino Etiopía, luego Sudán y Egipto”, explicó el asturiano.

“Recorrí África por tres años y en El Cairo, Egipto, me detuve para escribir mi libro titulado África con un par.

Álvaro filtrando agua en Kirguistán, en
el año 2008.
“Continué camino a Oriente Medio, entré por Jordania, pasé por Siria en el 2008 antes que estallara la guerra, Líbano, Palestina, Turquía, la isla de Chipre, Georgia, Armenia, Azerbaiyán, Irán, Turkmenistán, Uzbekistán, Kirguistán, Pakistán y llegué a Nepal en 2009 donde edité otro libro titulado El Diario fotográfico de un payaso en África, un libro de fotografía que fue premiado ese año en España”, dijo entusiasmado.

Preparando comida en Mongolia.
“Continué por India, Bangladesh, Bután, llegué a Tailandia en enero de 2010, Malasia, Indonesia, Timor Oriental, Brunei, Camboya, Vietnam, Laos, China, Mongolia, Corea del Sur, Japón, allí me agarró el tsunami de 2011, yo le traigo suerte a los países” (risas).

Álvaro se encuentra con un amigo en
Venezuela, 12 años después. Primero en 

el 2002 y luego en el 2014.
“Llegué a Australia, y luego a Nueva Zelanda en 2012, de allí volé a Hawái, y pasé a Alaska donde arranqué el 1° de junio de 2012 y vine bajando por Canadá, Estados Unidos en 2013, México, fui a Cuba, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá, toda América Central”, relató.

El biciclown pedaleando en Ecuador con
el Chimborazo al fondo.
“Llegué a Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y llegué a Ushuaia, hace un par de semanas, en invierno, con nieve y hielo en la carretera. Los días son muy cortos para pedalear, y allí tuve suerte que el Instituto Fueguino de Turismo, a cambio que yo difunda por el mundo la marca Tierra del Fuego, me pagó el billete de avión de Ushuaia a Buenos Aires. Aterricé en la capital y volví a arrancar en bicicleta, y aquí estoy”, dijo el ovetense.

Álvaro Neil, entrevistado en el programa
Contacto con la Creación, el 10 julio de 2015.
“Así que desde que salí de España la última vez, han pasado más de diez años, he recorrido más de 145.000 kilómetros en bicicleta, que son como cuatro vueltas a la Tierra, he hecho más de 68 espectáculos de clown para 21 mil personas, he publicado cinco libros y cinco documentales, y vivo al día”, destacó.

Empujando la bicicleta 7 Km hasta llegar
a  la localidad de Vilca, Perú.
Álvaro explicó que desde Rosario irá hacia el norte de la provincia de Santa Fe, cruza el Paraná y sigue hasta las cataratas del Iguazú, en Misiones, sigue a Paraguay, luego Brasil, donde a finales de setiembre hay un festival de payasos donde lo han invitado a participar y para dar unas charlas. Y probablemente, de Brasil regrese a la Argentina para escribir el libro de estos últimos cuatro años por América. Solo le falta recorrer Europa y calcula que en el 2017 estará terminando el viaje en la ciudad de Oviedo. Dijo: “Europa es el continente más fácil, lo dejo para cuando esté viejo”, (risas).

Biciclown con una anciana en Perú.
-Es un trabajo lindo-, hizo referencia Daniel Verón.

“Me he encontrado con otros ciclistas en mi recorrido, he encontrado a chicas solitarias también en bicicleta, vi gente que viaja en grupo, pero muy pocos en realidad, no es por ponerme medallas, pero hay más gente que ha ido al espacio, que gente que ha recorrido el mundo en bicicleta. Hay más astronautas que ciclistas que llevan más de diez años sin volver a su tierra, es una cuestión de estadísticas nada más”, respondió el ciclista ante la pregunta de los conductores.

Álvaro en Turquía.
Ante la pregunta de si alguna vez estuvo al borde de la muerte o fue asaltado, respondió: “He sido asaltado varias veces, pero solo por mujeres” (risas). Hace un tiempo que no se producen. Y respecto al peligro de muerte, en Nigeria me enfermé de Malaria cerebral, y en la habitación de al lado estaba un cura recuperándose de esa enfermedad y vino a darme la extremaunción, y bueno, me salvé. En otro lugar de África una serpiente casi me mata. Viajando por Turquía un auto me atropella y me salvé casi sin rasguños. Y tuve otros accidentes con automóviles donde tuve que parar y pellizcarme para darme cuenta que no estaba soñando y no me había pasado nada. Y así he contado siete veces que estoy viviendo gratis”.

El biciclown en Tirshit, Marruecos. Cruzando
los Montes Atlas nevados.
Seoane mencionó que debe tener un ángel Guardián y Álvaro dijo: “Deben ser unos cuantos y pedalean además” (risas).

-¿La gente como se comporta?, le preguntó Verón.

“La regla general es que cuanto más económicamente pobre  es el país, la gente es más hospitalaria, más te ayudan", aseveró.

"El 99,99 por ciento de las personas que he
conocido en más de una década es buena
gente", dijo Álvaro. Aquí en una foto 

con nativos de Malí.
"Así que África donde estuve tres años, no es el continente de la pobreza, es el continente de la hospitalidad. Allí, yo sin hablar los idiomas o dialectos locales, era bien recibido, me daban de comer, de dormir, todo, de gente que tenía menos que yo. En cambio, en países bien potentes económicamente, como Australia, Estados Unidos o Canadá, la gente es más fría, no te abre la puerta, son más reservados. Porque tienen el mal que predomina en la sociedad de hoy en día, que se llama… miedo. El miedo paraliza a las personas, el miedo hace que la gente se reserve, y el miedo está fomentado por los medios de comunicación. La gente ve asesinatos, han matado a mucha gente, pero también mucha gente a mí me ha ayudado, y esa gente no sale en la televisión. Solo dan malas noticias para que la gente se quede en casa, compre un seguro de vida y ponga rejas en el patio”, reflexionó.

"África no es el continente de la 
pobreza, es el continente de la 
hospitalidad", refexionó Álvaro.
El ciclista agregó: “Cuando la gente me dice que el mundo es peligroso, yo le pregunto ¿Qué conoces tú del mundo? Porque yo he recorrido 82 países y te digo que el 99,99 por ciento de las personas que he conocido en más de una década es buena gente. La mayoría de la gente es buena. La televisión no viaja como yo lo hago. Yo viajo a nivel horizontal yo viajo con la gente duermo en los bomberos, en iglesias, hasta en cementerios he dormido. Y los periodistas de televisión duermen en hoteles de cuatro estrellas. ¿Ve lo mismo que yo? No, no ve lo mismo que yo. Ahora en Ushuaia me quedé en casa de un chico que yo no conozco, y me abrió la puerta, de un monoambiente, y él durmió en su cama y yo dormí en el suelo, en mi colchón. Y esa persona yo no la conocía. Y él me dijo que cuando llegara a Pergamino viera a sus padres y así lo hice. Y cuando llegué sus padres estaban preparándome el almuerzo y diciéndome que me quede a dormir. Y así se van pasando la voz. Si uno se comporta bien, lógicamente te van recomendado al primo y al vecino. Ahora, si vas dejando un reguero de porquería, no te van a ayudar”.

El biciclown en Ushuaia, provincia de
Tierra del Fuego, Argentina.
-¿Hay de esa gente?-, preguntó Seoane.

“Sí. Lamentablemente cada vez hay más ciclistas pedaleando uno o dos años y a veces he llegado a cuarteles de bomberos, como me ha ocurrido ahora en Río Grande de Tierra del Fuego y me dicen que no puedo quedarme porque hace poco pasó por allí un ciclista y les robó un casco. Pero yo no, le digo. Pero ya el jefe me dijo que ninguno más. Es una pena que esto se esté contaminando. Antes yo pensaba que todo ciclista por el solo hecho de tener esa voluntad de esfuerzo físico era buen tipo pero no es así. Pero la mayoría es buena gente. Llegando a Rosario, paré en un semáforo y una chica desde la acera me preguntó si estaba viajando. Le dije que sí y me preguntó si necesitaba algo y le dije que no, que muchas gracias por su preocupación. Se puso en verde y arranqué. Que alguien que no te conozca te ofrezca ayudarte, es señal que la gente es buena”, respondió.

Álvaro con una jirafa en Tanzania.
El hecho de haber tenido alguna inseguridad un par de veces, es una anécdota que ni merece la pena comentarse. Aclaro que nunca me robaron la bicicleta. Prefiero hablar de cosas positivas porque son el 99 por ciento de mi viaje”, dijo.

-¿Qué hay del tema de los animales salvajes?, le preguntaron.

El biciclown descansando en Saltillo, México.
“He visto muchos, pero el animal más salvaje que he visto es el hombre manejando un auto. Les digo que el auto es una máquina diabólica que transforma a la persona, la hace ir a una velocidad que no es humana, la gente maneja a 80, escucha música, no presta atención, y te pasa al lado y te mata. Para mí si los leones me matan es porque tienen hambre, pero el conductor si te atropella, ni siquiera te come, se escapa”, comentó indignado.

El biciclown viajando por Armenia.
-Hay un matrimonio argentino, la familia Zapp, que están dando la vuelta al mundo con sus cuatro hijos, en un auto Graham Paige de 1928, ¿te los has cruzado en alguna parte?

“He hablado con ellos por teléfono. Estaba en la peluquería de Cristina Burgués y llamaron desde África para hablar con ella porque los conoce también y como yo ya había terminado de recorrer el continente africano, me dijo que ellos iban para África y les saludé y les di algunos consejos. Pero nunca los vi personalmente”, recordó.

Álvaro, llega a Texas.
-Tal vez te los cruces en Europa porque las últimas noticias de su viaje eran que de Kenia pasaban a Etiopía, luego Egipto y les quedaba Europa para terminar su vuelta al mundo-, le mencionó Seoane.

El biciclown  acampando en Sudán.
“¿Tienen cuatro hijos?”, preguntó Álvaro. Y Seoane le respondió que los cuatro les nacieron en distintos países, el primer en Estados Unidos, otro en Argentina, una hija en Canadá y el cuarto en Australia.

“Yo también creo que tengo algunos nacidos en distintos países pero no los conozco” (risas), bromeó el biciclown.

Álvaro junto a Horacio Castaño, presidente
del Centro Asturiano de Rosario, y Cristina
Burgués, en el estudio de radio Libertad
luego de la entrevista de Contacto
con la Creación.
-Cuando veas un payasito caminando por la calle, puede ser tuyo-, le dijo Verón. “No ese debe ser de Piñon Fijo” (risas), comentó Álvaro.

-Vemos también que has venido acompañado por Horacio Castaño, el presidente del Centro Asturiano de Rosario, signo de que te han abierto las puertas-, comentó Seoane.

El biciclown descansando en Angola. 
Obsérvese a la izquierda la bandera de 
Asturias en su bicicleta.
“Sí, los conocí la primera vez que vine aquí, en 2001 y ya he visitado Rosario en seis ocasiones. Mira que he estado en Centros Asturianos en muchas partes del mundo y todos se han portado muy bien, pero el de Rosario es el que más me ha apoyado. Incluso la bandera de Asturias que va en mi bicicleta me la regaló el Centro Asturiano de Rosario. Y cuando se me destroza por el viento, siempre me envían una nueva. El Centro Asturiano de aquí es como mi casa, e incluso estoy pensando para postularme como presidente” (risas).

Recorriendo los caminos de Nueva Zelanda.
En uno de los documentales que está en Internet se ve que Álvaro va pedaleando cuesta arriba con mucha dificultad, y el espectador ya se siente cansado por el esfuerzo y encima viene un camión y se le tira encima. “Esa situación no debió ser muy grande porque tuve el tiempo de poner el trípode de la cámara y grabarla. Las situaciones feas son las que no grabo. Pero, uno ya está acostumbrado a vivir con ese peligro, que no impide que yo esté cumpliendo mi sueño”, respondió.

-¿Cuántas bicicletas lleva utilizadas y cuántos neumáticos?, se le preguntó.

Álvaro bromeando en Radio Libertad con 
el arquitecto Alejandro Martín, 
un gran ciclista urbano.
Esta es la tercera bicicleta de la vuelta al mundo. Vino un amigo hasta la India para entregármela. La tengo desde el 2009, y se gastan un par de neumáticos por año, pedales, dos manubrios, un manubrio se me rompió en Bolivia. Tres sillines, y el lunes iré a la bicicletería Bengoa, ellos la primera vez que vine por aquí me regalaron dos ruedas de bicicleta y ya somos amigos. Ahora he ido a saludarles y quiero ver si le hacen un lifting a la bicicleta, como se hacen las actrices”, explicó el biciclown.

El Biciclown actuando en Chinguetti, Mauritania.
Álvaro explicó que el miércoles dará un espectáculo gratuito para los niños del barrio Toba donde está la hermana María Jordán. “Casualmente, yo la primera vez que actué en Rosario fue para la hermana Jordán. La visité el jueves y está igual, con una comunidad llena de miseria y una monja llena de ilusión. Es una fuente de energía esa mujer. Voy a hacer mi espectáculo para los niños el miércoles 15 de julio a las 14 horas. Será mi único espectáculo de este año en la Argentina. Mi espectáculo no tiene ningún mensaje ni político ni religioso. Son 50 minutos de diversión para niños y grandes. Lo que me llamó la atención es que la hermana Jordán se acordaba de detalles del espectáculo y me preguntó si seguía haciendo el número de la tortilla y le dije que lo seguía haciendo que se quede tranquila. No ha cambiado el menú del biciclown” (risas).

Riendo en Sudáfrica.
Como consejo final para la audiencia dijo: “Para hacer esto no hace falta tener grandes piernas, sino una cabeza tan dura como las posaderas y mucha fuerza de voluntad, la cual va creciendo a medida que vas cumpliendo tu sueño. Al principio te derrota un viento o una lluvia y ahora es muy difícil que te derrote el clima. He tenido accidentes, enfermedades, he estado a punto de morir siete veces, y eso te reafirma, lo que no te mata te fortalece”.

Álvaro por el desierto australiano.
Durante el transcurso del programa Álvaro, nombró su portal en Internet donde va dejando registro de sus viajes: www.biciclown.com y explicó que “no hay otro biciclown en el mundo, solo soy yo, en Facebook tengo más de 8.000 seguidores. También mi último documental que se llama Contagiando alegría, está en el sitio vimeo.com y la gente lo puede ver y alquilar por solo 1 dólar con 70 centavos. Tú puedes entrar y ver el documental y si te gusta lo alquilas por 24 horas para que lo vean otros. O puedes comprarlo por 4 dólares. Luego con una contraseña, electrónicamente lo descargas y lo ves en tu casa. No tienes que esperar a que llegue el cartero con el paquetito y sin tener que pagar gastos de envío. Los que quieran conseguir mis libros pueden hacerlo a través de mi página donde hay enlaces para comprarlos. Los libros se envían desde España por correo certificado”.

Pedalear por el mundo se ha convertido en su modo de vida. Aún le quedan muchos kilómetros por recorrer al biciclown y cosechar nuevas experiencias. Así pasó por el programa el biciclown, un ser humano que viaja por la carretera del mundo y que nos inspira para seguir adelante.

Por Alberto Seoane



Al correo del programa contactoconlacreacion@gmail.com llegaron los siguientes mails en el momento que Álvaro se retiraba del programa:

El Biciclown en Siria.
Héctor José Estévez  
Estaba buena la charla. Me dieron ganas de agarrar una bici, hace mil años que no ando en una…

Jorge Leiva
Interesantísimo el invitado... Tenía que ser español... Sangre de aventurero como lo fueron sus ancestros... Se pasaron al traerlo.

Darío Casanovas
Hace más de un año que te sigo. Sos una gran inspiración por tu despojo y filosofía de vida. Amor a los niños, aventura y riqueza espiritual. Ojalá haya menos astronautas y más biciclown. Abrazo desde Santa Fe.


Para ver los distintos videos de Álvaro por el mundo pueden encontrarlos en estos enlaces:

En su recorrido por África iniciado en noviembre de 2004 Álvaro Neil, el biciclown, enumera algunos de los sitios que visitó en bicicleta:

Miles of Smiles Around the World

Entrevista del corresponsal de la BBC en El Cairo:

El Cairo, Diciembre 2007

Georgia y África

Álvaro llega al Himalaya:

Climbing Kuluku pass

El biciclown en la India:

Pedaleando con más de 100 kgs

Para ver video de Álvaro Neil Grabado en Mongolia, India y Nepal en primavera de 2009 y otoño de 2010 hacer clic aquí:

Biciclown - La Sonrisa Del Nómada (Teaser)

El biciclown conoce China:

A day in China

Álvaro en Mongolia:

Cycling in west side of Khosvol Lake (Mongolia)

Una boda en Vietnam:

El Padrino.wmv

Alrededor del mundo en bici, Jombang, Indonesia

El biciclown llega a Japón:

My birthday in KYOTO

Álvaro Neil señala en un mapa todo su recorrido hasta el momento:

El biciclown en las Mejores Jornadas del mundo en Bicicleta

El biciclown llega a Australia:

Cycling north Australia

Human Powered supporting biciclown in Melbourne

El biciclown llega a Nueva Zelanda:

Sirenita, sirenita, mira mis 5 finger

Álvaro se divierte en Hawái:

Having fun and Aloha in Hawaii

El biciclown en Alaska y Canadá:

Tras la rueda del biciclown

Álvaro en California:

Surf in LA

Entrevistado en México:

Biciclown: Payaso por vocación, con el mundo bajo sus ruedas

Magia en Nicaragua

El biciclown llega a Panamá:

Cruce Paso Canoas de Costa Rica a Panamá

Entrevistado en Panamá:

Biciclown: 10 años pedaleando y haciendo reír

La frontera olvidada entre Ecuador y Perú

El biciclown en Perú:

¿Y si no entiendes?

Álvaro Neil llega a Chile:

El payaso que reparte en su bici millas de sonrisas por el mundo

El biciclown rumbo a Ushuaia tras 10 años pedaleando:

Una mirada al sur

Álvaro Neil se presenta en Rosario

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