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lunes, 12 de mayo de 2014

FALLECIÓ A LOS 67 AÑOS EL DR. ANDRÉS CARRASCO, EL CIENTÍFICO ARGENTINO QUE NOS ALERTÓ SOBRE LOS PELIGROS DE LOS AGROTÓXICOS

En sus presentaciones públicas Carrasco cuestionó que la ciencia esté al servicio de las corporaciones. Confirmó en 2009 el efecto letal que produce el glifosato en los embriones y en todo ser vivo. Malformaciones neuronales, intestinales y cardíacas en embriones, aun en dosis mucho más bajas que las utilizadas en la agricultura. “Lo que sucede en la Argentina es casi un experimento masivo porque en ningún lugar del mundo hay tantas plantaciones concentradas de soja como en el país”, denunciaba.

Andrés Carrasco (1946-2014), el investigador
que le hizo frente a los agrotóxicos.
El sábado 10 de mayo falleció el Dr. Carrasco, según anunció el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) de Argentina. Había nacido en 1946, y en 1971 se recibió de médico en la Universidad de Buenos Aires. Ingresó al CONICET en 1990, especializándose en embriología molecular. Carrasco fue investigador principal del CONICET en el Instituto de Biología Celular y Neurociencia “Profesor E. De Robertis” (IBCN, CONICET-UBA), donde conducía el Laboratorio de Embriología Molecular.

El investigador específicamente se dedicó al estudio de genes asociados con el desarrollo embrionario de vertebrados. Además de su trabajo como investigador, Carrasco fue a lo largo de su carrera subsecretario de Innovación Científica y Tecnológica del Ministerio de Defensa de la Nación y Presidente del CONICET entre 2000 y 2001.

El glifosato produce malformaciones
neuronales, intestinales y cardíacas
en embriones, aún en dosis mucho
más bajas que las utilizadas en
la agricultura.
Confirmó en 2009 el efecto letal del glifosato en los embriones y en todo ser vivo. El glifosato produce malformaciones neuronales, intestinales y cardíacas en embriones, aun en dosis mucho más bajas que las utilizadas en la agricultura. En 2009 publicó en la prensa su trabajo que denunciaba que el glifosato puede producir malformaciones neuronales, intestinales y cardíacas en los embriones humanos.

"Cuando uno demuestra hechos que pueden tener impacto en la salud pública, es obligación darle una difusión urgente y masiva", explicaba por aquella época, y atacaba a los investigadores que trabajaban al servicio de las multinacionales.

“Lo que sucede en la Argentina es casi un experimento masivo porque en ningún lugar del mundo hay tantas plantaciones concentradas de soja como en el país”. A partir de la publicación de su informe en 2009 fue atacado por el ministro de Ciencia y Tecnología de la Nación, Lino Barañao, quién le quitó toda legitimidad al trabajo del subsecretario de Defensa, que era el Dr. Carrasco, que alertaba a todos los argentinos sobre perjuicios para la salud en el herbicida glifosato, que se utiliza en el cultivo de soja. Dijo Barañao en una entrevista que, Carrasco “no era miembro del Conicet”.

El funcionario kirchnerista Lino Barañao,
ministro de Ciencia y Tecnología de la Nación,
defensor del glifosato, en varias ocasiones
intentó desacreditar al Dr. Carrasco.
El funcionario kirchnerista Lino Barañao intentó desacreditar la investigación del Dr. Carrasco y defendió al glifosato al restar autoridad a un trabajo presentado por el subsecretario de Investigación Científica y Tecnológica del Ministerio de Defensa, Andrés Carrasco.

Y Carrasco seguía denunciando en cualquier acto, encuentro o congreso donde se lo invitara: “hay centenares de pueblos que son la prueba viva de la emergencia sanitaria”. “Si hay alguien que no quiere tocar el modelo sojero es el gobierno”.

En el año 2010 la investigación del Dr.
Carrasco fue publicada en la revista
científica Chemical Research
in Toxycology.
En el año 2010, el trabajo de Carrasco apareció en la revista especializada estadounidense Chemical Research in Toxycology (Investigación Química en Toxicología). Las diez páginas de la revista científica explicaban el efecto negativo del agrotóxico glifosato (ingrediente principal en el pesticida Roundup de Monsanto): microftalmia (ojos muy pequeños), microcefalia (cabezas pequeñas y deformadas), ciclopía (un sólo ojo en el medio del rostro), malformaciones craneofaciales y acortamiento del tronco embrionario. El Dr. Carrasco había puesto en jaque a la industria  de agrotóxicos por ello, recibió amenazas y presiones de toda índole.

Atacado en la provincia de Jorge Capitanich
En agosto de 2010 el Dr. Carrasco estuvo en Chaco, la provincia gobernada por Jorge Capitanich Popovich, el actual jefe de gabinete de Cristina Kirchner. Estaba por dar su charla en la localidad de La Leonesa, sobre los peligros para la salud que implica la utilización del glifosato, pero empresarios arroceros y punteros políticos intentaron “lincharlo”. Había concurrido a una escuela de un barrio fumigado, y no pudo hablar.

El Dr. Carrasco renunció a su cargo de
funcionario cuando le ordenaron que dejara de
alertar sobre el daño en la salud que
produce el glifosato.
Carrasco era funcionario del gobierno: Secretario de Ciencia en el Ministerio de Defensa y le pidieron que bajase el tono de las críticas al glifosato y al modelo agropecuario. No lo hizo. Renunció y siguió denunciando el peligro de los agrotóxicos casi hasta el último día de vida.

Sin duda el Dr. Andrés Carrasco, junto con otros científicos que lo precedieron como los franceses Robert Belle y Gilles-Eric Seralini, que han hecho estudios con otros modelos, y con resultados más importantes que los  de Carrasco, ha sido muy molesto para multinacionales como Monsanto al mostrar a todo el mundo los datos de sus estudios con los efectos tan severos, espeluznantes e irreversibles que causan sus herbicidas. El glifosato es el ingrediente clave en los pesticidas Roundup de Monsanto, que se han combinado con plantas modificadas genéticamente para incrementar el modelo de cultivo único que se expande por Estados, Brasil y Argentina.

La Agencia de Protección ambiental
(EPA) de los Estados Unidos, influenciada
por las multinacionales de agrotóxicos
dice que el glifosato es
prácticamente inocuo.
La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) y otros reguladores han dicho que es razonablemente inocuo si es aplicado apropiadamente. Pero pocos países hacen cumplir rigurosamente las reglas de los pesticidas, y la expansión de la agricultura industrial ha expuesto cada vez más a las personas al glifosato y a otras substancias químicas.

El estudio de su equipo, publicado en la revista Chemical Research in Toxicology, concluyó que inyectar dosis muy pequeñas de glifosato a embriones puede cambiar los niveles de ácido retinoico, provocando el mismo tipo de defectos en la espina dorsal que los médicos están registrando en comunidades en las que los herbicidas son omnipresentes.

El ácido retinoico, una forma de vitamina A, es fundamental para combatir el cáncer y desatar la expresión genética, el proceso por el cual las células embrionarias se desarrollan hasta formar órganos y extremidades. "Si es posible reproducir esto en un laboratorio, sin duda lo que está sucediendo en el campo es mucho peor", decía Carrasco a los medios periodísticos. "Y si es mucho peor, y nosotros sospechamos que lo es, lo que tenemos que hacer es examinarlo cuidadosamente".

Su trayectoria
"El glifosato produce defectos en la espina dorsal
que los médicos están registrando en las
comunidades donde los herbicidas son
omnipresentes", denuncia el Dr. Carrasco.
El doctor Andrés Carrasco realizó tareas de investigación  en diversas Universidades entre las cuales se destacan:
Universidad de Basilea. Suiza.
Instituto de Biología Celular y Molecular de de Universidad de Indiana
Departamento de Genética Molecular. Universidad  de Texas, Houston, Texas.
En 1984 junto a un equipo descubrió genes muy importantes para el desarrollo embrionario, genes Hox. Publicó dos trabajos en Cell, una de las mejores revistas del mundo. Tuvieron que pasar años para que la comunidad científica lo validara.
1990-1992. Investigador Adjunto del CONICET.
1992-1995. Investigador Independiente del CONICET.
1995- hasta su muerte. Investigador Principal (Group Leader). CONICET.
1999. Profesor Visitante de Universidad de Göttingen. Alemania. (Setiembre-Octubre, 1999).
2002-Universidad de California, Irvine (UCI) USA.
Fue Miembro Activo de las siguientes Sociedades Científicas:
- Sociedad Argentina de Neuroquímica (SAN).
- Sociedad Argentina de Investigación Bioquímica (SAIB).
- Asociación Argentina de Biología del Desarrollo (AADB).
- Society of Developmental Biology. (SDB-USA)

Además dictó y participó en numerosos cursos y simposios tanto de nivel nacional como internacional y posee publicaciones en libros desde el año 1971 referidos a la temática “Biología Molecular y la Embriología”.

Una decena de provincias argentinas están
plagadas de víctimas de agrotóxicos.
Carrasco solía decir que una decena de provincias están plagadas de víctimas de agrotóxicos, en donde proliferan los cultivos transgénicos.

Es sabido, tanto en la comunidad científica como en el sector agropecuario, que la aspersión del herbicida afecta ecosistemas, operando directa o indirectamente sobre insectos y otras especies animales cuando se ponen en contacto con el herbicida. O sea que además de células vegetales, también afectan organismos compuestos por células animales. “Nuestros experimentos alertan que tanto el cóctel comercial como la droga pura en células animales generan alteraciones del desarrollo embrionario. Por lo tanto el glifosato dentro de la célula embrionaria altera el funcionamiento celular, tal como sucede en las células vegetales de las malezas. Por otra parte, ya está probado que los herbicidas se trasladan por la acción del viento. Es una prueba de la realidad, incontrastable, el padecimiento de familias de campos linderos y de barrios cercanos a las fumigaciones. Por lo tanto, el glifosato puede atravesar barreras respiratorias y/o placentarias y entrar a las células embrionarias, incluso existen avances científicos en esa dirección, como también existen registros de glifosato y de sus posibles metabolitos presentesen mujeres embarazadas. Esto podría correlacionarse con potenciales efectos malformativos. Por lo tanto, desentrañar si el glifosato puro inyectado tiene efectos sobre el comportamiento de células embrionarias animales durante el desarrollo era ineludible en una estrategia experimental correcta, e insisto que utilicé una estrategia de análisis clásica de la investigación científica”, decía Carrasco.


En 2011 se descubrió a través de 
Wikileaks que la Embajada de los 
Estados Unidos en Argentina lo había 
investigado al Dr. Carrasco por sus 
publicaciones respecto 
al uso de glifosato.
En 2011 se conoció a través de un cable publicado por Wikileaks que la Embajada de Estados Unidos en Argentina lo había investigado a Carrasco por sus publicaciones relacionadas al uso de Glifosato. También recibió llamadas anónimas para amenazarlo.

Su especialidad en la temática lo hizo protagonista del juicio por fumigaciones en barrio Ituzaingó Anexo (agosto de 2012) que concluyó con la condena a tres años deprisión condicional al productor rural Francisco Parra y al piloto Edgardo Pancello por las fumigaciones ilegales.

En el barrio Ituzaingó murieron en muy pocos años 272 personas entre 2000 y 2009. Es una tasa altísima para un barrio de cinco mil personas. Y 143 personas tienen hoy cáncer. Además, 23 chicos nacieron con malformaciones congénitas y hubo 274 abortos espontáneos.

Las madres del barrio Ituzaingó Anexo en
Córdoba en una de sus protestas contra el uso
de agrotóxicos sobre sus casas. Lograron la
condena a tres años de prisión de un productor
rural y a un piloto. 
“No entiendo por qué mi relato tiene más importancia que el de las Madres de Ituzaingó (barrio de las afueras de Córdoba, emblema de la contaminación con agroquímicos). Los médicos de las provincias están desde hace años denunciando, los campesinos y las barriadas urbanas también. Y queda todo silenciado. Es una evidencia de la realidad y es incontrastable. Yo me inspiré en esa realidad y los resultados son los conocidos”, decía.

Carrasco reveló que "las empresas del agro, los medios de comunicación, el mundo científico y la dirigencia política son básicamente hipócritas respecto de las consecuencias de los agrotóxicos, porque no quieren observar las innumerables evidencias médicas y reclamos en Santiago del Estero, Chaco, Entre Ríos, Córdoba y Santa Fe".

"Las empresas del agro, los medios de
comunicación, el mundo científico y la dirigencia
política son básicamente hipócritas respecto de
las consecuencias de los agrotóxicos", alertaba
el Dr. Carrasco.
En 2013 pasamos en nuestro programa radial Contacto con la Creación el audio de la entrevista al Dr. Carrasco, realizada por el Canal 4 de Totoras en el 2º Congreso Latinoamericano de Salud Socioambiental 2013 y 1º Congreso Internacional realizado en la Facultad de Medicina de Rosario, realizado del 25 al 28 de junio de 2013.

En dicha ocasión el investigador Andrés Carrasco dio una conferencia titulada:"Transgénicos. Aspectos tecnobiológicos, límites y peligros." 

Sin duda alguna, su pérdida es un golpe duro para todos los que desean un mundo sin venenos mortales, para todos los que desean la desaparición de los cultivos transgénicos y para todos los que admiraban al Dr. Carrasco por su gran esfuerzo, su profesionalidad en sus investigaciones y trabajos científicos que son aportaciones de incalculable valor para la población argentina y para toda la humanidad.

Vea aquí algunos videos sobre el Dr. Carrasco:



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