Es la primera vez
que un presidente habla en esta movilización mediante una pantalla gigante. La movilización antiabortista se celebra desde hace 45 años en
Washington. El vicepresidente Mike Pence lo definió como el mandatario
"más pro-vida de la historia" de los Estados Unidos.
Discurso de Donald Trump durante la marcha antiaborto en Washington, el 19 de enero. |
El
presidente estadounidense Donald Trump
participó el viernes 19 de enero de este año de la manifestación que se hace
cada año en Washington contra del derecho al aborto en el país. Es la primera vez que un primer mandatario
da un discurso durante una de estas protestas.
En
su alocución criticó la decisión de la Corte Suprema de 1973 ante el caso Roe
versus Wade -que habilitó el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo
en el país-, y prometió que defendería
el que es el primer derecho consagrado en la Declaración de Independencia: el
derecho a la vida. Desde 1973 a enero de 2017 fueron asesinados 59.115.995 de
niños en gestación.
"El fallo Roe
versus Wade ha resultado en una de las leyes de aborto más permisivas del
mundo",
dijo Trump ante miles de personas reunidas en el National Mall. "Está mal,
tiene que cambiar", afirmó también sobre los abortos tardíos habilitados
en algunos estados.
En su discurso, Trump prometió "defender el que es el primer derecho consagrado en la Declaración de Independencia: El Derecho a la vida". |
Donald Trump es el
primer presidente en hablar en la marcha que se celebra hace 45 años, a través de una
pantalla en vivo vía Skype. El año pasado, apenas una semana después de asumir
el cargo, había participado del evento el vicepresidente Mike Pence.
Durante
su discurso de este año, Pence -quien es un conocido activista por esta causa
con fuertes lazos con los conservadores- dijo que Trump "ha hecho una diferencia en favor de la vida" durante
su primer año de mandato y que "es
el presidente más pro-vida de la historia de los Estados Unidos".
Mientras
tanto, el gobierno develó el viernes una serie de normas con las que busca proteger a entidades médicas que se
nieguen a practicar abortos por motivos religiosos, una posibilidad
conocida como "objeción de conciencia".
Desde 1973 hasta la actualidad fueron asesinados en Estados Unidos más de 60 millones de niños en gestación. |
El
Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos (HHS por sus siglas
en inglés) delineó la normativa a seguir para proteger a toda entidad
que se niegue a aplicar procedimientos, como el aborto, por motivos religiosos.
Además
anuló una directriz aprobada bajo la presidencia de Barack Obama que le dificultaba
a los estados negarles el programa asistencial Medicaid a entidades de
planificación familiar como Planned Parenthood.
La
nueva norma busca "garantizar que se cumplan leyes que hasta ahora no se
han aplicado a cabalidad", dijo Roger Severino, un abogado
conservador que será director del nuevo departamento. "Estas normas son
aspectos estándar cuando se trata de hacer cumplir leyes de protección de
derechos civiles".
Bajo
esa ley, los hospitales, universidades, clínicas y otras entidades que reciben
fondos de programas del departamento federal como Medicare y Medicaid tendrán
que certificar que están obedeciendo unas 25 leyes federales de protección de
conciencia y de religión. La mayoría de estas leyes se refieren a
procedimientos como aborto, esterilización y suicidio asistido. Cualquier infracción podría acarrear la
pérdida de fondos federales.
Desde que asumió Trump la presidencia, ya cerraron 32 clínicas abortistas Planned Parenthood por falta de fondos del gobierno. |
Luego
de 45 años de crimen legalizado en Estados Unidos, ya estamos por ver caer el
muro de la muerte para siempre. Felicitaciones
al pueblo de Estados Unidos por este nuevo paso a favor del derecho a la vida
de todos. ¡NO AL ABORTO! ¡SÍ A
LA VIDA!!!
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