REALIZAN EXCAVACIONES EN LA CIUDAD OLVIDADA DE MAPELA

En la zona sur de Zimbabue, cerca de la frontera con Botsuana, en la región africana de Shashi-Limpopo, se halla el yacimiento arqueológico de Mapela. Allí se están sacando a la luz las ruinas de una comunidad urbana que existió probablemente durante cerca de un millar de años. 

Colina donde se asentaba la fortaleza de
Mapela Hill, cerca del río Shashi. 
Obsérvese la construcción megalítica 
que probablemente, fue erigida por una 
civilización anterior al siglo VIII.

Este olvidado yacimiento arqueológico fue examinado por vez primera a principios de los años 60. Como resultado de los cambios políticos en el país, que entonces era conocido como Rodesia, cesaron las investigaciones en este yacimiento arqueológico.

Las ruinas de Mapela están situadas en la árida región de Shashi-Limpopo, en una zona que de forma natural ya es de difícil acceso, y se acabó subvalorando la importancia de estas construcciones, tal vez, deliberadamente, temiendo un descubrimiento que obligue a reescribir la historia y todo indica que el yacimiento de Mapela resultó ser de una enorme importancia para conocer el pasado de la humanidad. 

El Dr. Shadreck Chirikure, de la Universidad
de Ciudad del Cabo, durante una
conferencia sobre la cultura Mapungubwe.

En junio de 2013, se iniciaron nuevas excavaciones bajo la dirección de Shadreck Chirikure, de la Universidad de Ciudad del Cabo en Sudáfrica. Chirikure y sus colegas descubrieron una amplia área con muros megalíticos de piedra, enormes montones de excrementos animal fosilizado, cerámica, ruecas (máquinas de hilar) y miles de cuentas de cristal que atestiguan el desarrollado comercio con otros países, probablemente la India y China, que la ciudad sostuvo en su época de esplendor. La datación por carbono indica que Mapela era una comunidad floreciente que existió de forma continua desde principios del siglo VIII hasta bien entrado el XVIII. 

Ubicación de las misteriosas ciudades
de Mapela, Khami, Gran Zimbabwe, 
Bosutswe y Mapungubwe.

Las excavaciones en Mapela prosiguen, y lo harán hasta 2017, bajo una iniciativa de colaboración entre la Universidad de Ciudad del Cabo y la de Oslo en Noruega. Desde junio de 2014, el arqueólogo Per Ditlef Fredriksen, de esa última universidad, colabora de forma destacada en la investigación de la ciudad olvidada.

Esta antigua urbe de Mapela es una de una serie de comunidades urbanas históricas que han sido descubiertas en la región de Shashi-Limpopo. Las ruinas de las ciudades de Khami y Gran Zimbabue, más famosas, ambas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, están también situadas en esta parte del sur de África.

Per Ditlef Fredriksen de la
Universidad de Oslo, también
colabora en develar el
misterio de la civilización
olvidada
de Mapela.

La región de Shashi-Limpopo comprende las zonas fronterizas de cuatro países actuales: Zimbabue, Botsuana, Sudáfrica y Mozambique. Este lugar fue el foco de una civilización que se entendió durante cientos de años. Se ha confirmado el mismo tipo de cerámica a través de los siglos y otros objetos de uso cotidiano. Según la arqueología oficial Mapungubwe se desarrolló entre el 1200 y 1290. El Gran Zimbabue entre el 1300 y 1450 aproximadamente y Khami se desarrolló entre el 1450 y 1820. 

Hoy en día, Mapela está situada en un área agrícola subdesarrollada y marginal, y anteriormente la comunidad arqueológica asumía que fue también una región árida, así como un centro regional de poca importancia. Los nuevos hallazgos, sin embargo, indican lo contrario.

Las excavaciones en las ruinas de Mapela son
un proyecto conjunto de la Universidad
del Cabo y la de Oslo.

Cada vez está más claro que la ciudad olvidada de Mapela debió ser más grande que la conocida localidad de Mapungubwe, donde al parecer residía la élite de la sociedad local. Quizá incluso el clima era bastante diferente en épocas anteriores. De hecho, la ciudad de Mapela siguió existiendo durante siglos, mientras que otras comunidades, como la de Mapungubwe, perecieron.

Los arqueólogos desconocen porque siguió existiendo esta comunidad a través de los siglos. Ese es uno de los motivos por el que se continúa la exploración y excavación en esta nueva fase del proyecto arqueológico en Mapela.