EL MÁS GRANDE ARCHIVO CIVIL DE OVNIS SE ENCUENTRA EN SUECIA

Adjuntamos un artículo escrito exclusivamente para Contacto con la Creación por el Sr. Ricardo Ferrera, un rosarino que reside en Inglaterra.  


Tres de los fundadores de AFU:
Håkan Blomqvist, Kjell Jonsson y
Anders Liljegren. Foto: AFU.

El más grande archivo civil sobre la temática OVNI está en Norrköping, Suecia. Se llama AFU y tiene 24.000 libros, 1500 metros de estantes con libros, 550.000 artículos, 42.000 informes OVNI, 20.000 fotos, 120 microfilms y 45.000 revistas. Además, organizan los fines de semana cursos para investigadores de campo.



Un sector de los archivos de AFU.

AFU son las siglas en inglés de Archives for UFO Research (Archivos para la investigación de los OVNIs), fue fundada en Suecia en 1973. Hoy ésta Fundación reúne los más grandes archives civiles sobre el fenómeno Ovni de todo el mundo.



Su sede está en Norrköping, una ciudad de 87.000 habitantes del este de Suecia, en la provincia de Östergötland. A su cargo hay un equipo de voluntarios y su cara más visible es el investigador Clas Svahn.



El investigador sueco
Clas Svahn. Foto del 
propio Svahn.

El prestigioso investigador sueco Clas Svahn es muy conocido en los medios ufológicos del Reino Unido, trabaja en el más grande matutino sueco (Dagens Nyheter), es director del grupo UFO Suecia (www.ufo.se, blog: http://www.ufo.se/blogg/) fundado en 1970 y es vice director de los archivos OVNI más grandes del mundo: www.afu.info (la biografía de Svan se encuentra en www.afu.info/peoplecs.htm). Svahn es autor de 11 libros y co-autor de otros 14 y vive en Järfälla afuera de Estocolmo.

La última aparición pública de Svahn fue el 22 y 23 de setiembre de 2012 en el Congreso por los 50 años del grupo ufológico británico BUFORA, el más antiguo del Reino Unido, en el hotel Holiday Inn de Londres. Hubo exposiciones de trece investigadores y ovnílogos de todo el mundo, entre ellos el español Vicente Ballester Olmos.

El material acumulado por AFU
sobre la temática OVNI
representa 1.500 metros
de estanterías. Foto: AFU.

El investigador nórdico comenzó su exposición haciendo un tour fotográfico de los archivos de la AFU. Poseen tres edificios, y el gobierno sueco remunera a gente desempleada para que colabore en el cuidado y catalogación de esos archivos, que como decíamos, son los más grandes del mundo (la lista de revistas argentinas que tienen archivadas están aquí pero son de varias décadas atrás: www.afu.info/magsar.htm, varias de las cuales dirigía mi amigo Guillermo Aldunati, de AOA de Rosario, Argentina, primer grupo al que me asocié).

Explicó Svahn que tienen 24.000 libros, 1500 metros de estantes con libros, 550.000 articulos, 42.000 informes OVNI, 20.000 fotos, 120 microfilms y 45.000 revistas. Además, organizan los fines de semana cursos para investigadores de campo.

Los “cohetes fantasmas suecos”

El tema que luego desarrolló Svahn se llamó “Ghost Rockets” (cohetes fantasmas), un fenómeno único de Escandinavia, donde desde 1946 se han hecho mil denuncias de objetos con forma de cohete o misil que vuelan sobre los cielos, sobre todo de Suecia, y caen casi siempre en lagos (esto, como me explicaba el conocido investigador noruego Ole Jonny Braenne, no es casualidad. Gran parte del suelo sueco está cubierto de lagos).


En el centro de la foto tomada por el
matrimonio Reutersward el 9 de julio
de 1946 se puede ver un objeto
en forma de cohete.

Existe una foto del 9 de julio de 1946 tomada por el matrimonio Reutersward, formado por Erik y Ása que pasaban unas plácidas vacaciones en el Guldsmedshyttan, al noreste de Lindesberg en el condado sueco de Västmanland. Sobre las 14:30 horas se encontraban en una torre de vigilancia forestal, ubicada sobre una mina de plata abandonada y obtuvieron una foto de un "cohete fantasma".

Lo curioso es que esos cohetes o misiles continúan surcando los cielos escandinavos hasta hoy, es decir luego de terminada la Guerra Fría, dijo Svahn. Otro detalle curioso es que los objetos no vuelan solo de Este a Oeste (siendo Rusia el gran sospechoso) sino también de Oeste a Este, es decir desde el mar.

Svahn explicando el fenómeno de los
"cohetes fantasmas" en Suecia, durante
el Congreso celebrado en Londres
por el cincuentenario de BUFORA. 
Foto: Clas Svahn.

Sería fácil echarle la culpa a la vieja URSS o la actual Federación Rusa, pero es necesario decir que la URSS a pesar de diferencias ideológicas no tenía una relación beligerante con Suecia durante la Guerra Fría. Los hechos reales que inspiraron el filme La caza del Octubre Rojo con Sean Connery, muestran que Suecia no se alarmó cuando el submarino amotinado se iba acercando a sus costas. Lejos de dar el alerta a EE.UU o Inglaterra esperaron pacientemente hasta que el submarino rebelde fue capturado por fuerzas leales al régimen soviético. Eso debido a cierta lógica en la relaciones sueco-soviéticas (no había beligerancia y además un ataque a Suecia hubiera llevado a la URSS a una situación trágica). La beligerancia en el uso de misiles de prueba se ve en casos de marcada enemistad como los de China y Taiwán, o Corea del Norte con Corea del Sur y Japón.

Pero que los misiles sigan apareciendo en los cielos escandinavos después de la Guerra Fría, y que no siempre vengan de la frontera rusa ha creado una gran incógnita a los investigadores.

Dibujo desclasificado en 2008 de la nave
cigarro sobre el avión de pasajeros.

Svahn habló del caso de un cigarro volador que escapó a gran velocidad el seguimiento de un avión que volaba a 800 millas por hora. Luego en 1977 Sven Hjalmarsson, piloto de guerra, persiguió con su caza Dragon A35 a un objeto alargado que desapareció a gran velocidad.

También recordó el caso del piloto de Alitalia, Achille Zaghetti quien el 21 de abril de 1991 sobrevolaba las Islas Británicas, en un vuelo Milán-Londres. El radar del aeropuerto advirtió al piloto de que un objeto con forma de misil volaba detrás del avión, un McDonnell Douglas MD80. El objeto, que tenía forma de cigarro, se hallaba a 300 metros de distancia, volando encima del avión. El informe de este caso fue desclasificado por el gobierno inglés en el 2008. Una investigación determinó que no se trató de un misil pero tampoco determinó que era ese objeto.



Los investigadores Vicente Ballester Olmos
y Clas Svahn durante un descanso.
Foto: Ricardo Ferrera.

Clas Svahn ha organizado recientemente una investigación en uno de los lagos donde cayó un cohete, pero la búsqueda se hizo muy difícil debido al lodazal del fondo del lago, más otros elementos que impiden una investigación exitosa en este momento.

Svahn, antes de terminar su presentación, devolvió a Matt Lyons, director del BUFORA, uno de los últimos documentos de los  archivos de esa organización británica que la AFU sueca ha digitalizado.

Algo para tener en cuenta: para abaratar costos, los investigadores de Suecia y Noruega se unieron con el objetivo de publicar una revista, que en realidad son dos. La tapa (según como uno tome la revista por delante o por detrás), por ejemplo, puede ser el inicio de la revista sueca, y la contratapa el inicio de la noruega, y en la mitad de la revista, girando 180 grados, está la otra revista en el otro idioma. Es decir, como ambas lenguas son parecidas, los lectores de ambos países pueden leer dos revistas al precio de una, y el gasto se reduce considerablemente. Esta es una idea que podrían tener en cuenta, por ejemplo, editores brasileños y de países vecinos de habla castellana, o españoles y portugueses.

Clas Svahn y Ricardo Ferrera, autor del
artículo y único iberoamericano presente
en el 50º Aniversario de BUFORA.
Foto: Ricardo Ferrera.

Otra cosa que hay que remarcar es que la AFU digitaliza archivos OVNI de todo el mundo. Alguien del público preguntó sobre archivos de Sudamérica y Svahn aclaró que lamentablemente el envío en general resulta costoso a los responsables de esos documentos. De todos modos, es un tema que merece ser analizado individualmente. Luego hablé con Svahn sobre la posibilidad de digitalizar archivos OVNI de Latinoamérica. Muy gentilmente me agradeció si me ponía en contacto con grupos del continente americano, pues el AFU sueco hace la digitalización sin fines de lucro.

Ya nos pondremos en contacto con grupos de Latinoamérica que estén interesados en la digitalización de sus archivos. El AFU sueco ofrece ese servicio prácticamente único en el mundo.

La distancia y los idiomas pueden ser una barrera para los investigadores que viven en las antípodas del mundo. Pero en la era digital, con tan buenos traductores electrónicos y online (Bing, Google, etc.), seguir el trabajo de un serio e incansable profesional como es Clas Svahn será un viaje de descubrimiento y placer intelectual para conocer los fenómenos y excelentes trabajos de investigación, catalogación y difusión escandinavos.

Por Ricardo Ferrera

ferreraricardo@yahoo.com