Investigadores en Estados Unidos dicen haber desarrollado un nuevo tipo de lámpara que podría usarse en lugar de los tubos fluorescentes y las de larga vida.
La luz se genera con un material hecho a base de capas de plástico, y sus creadores aseguran que es más eficiente y produce una iluminación de mayor calidad al no parpadear. Los científicos detrás de esta tecnología creen que las primeras unidades podrían fabricarse en 2013.
Un blanco más brillante
La nueva luz ha sido bautizada como tecnología electroluminiscente inducida por polímeros (Fipel, por sus siglas en inglés) y está hecha a base de tres capas de polímeros blancos que contienen un pequeño volumen de nanomateriales, los cuales brillan cuando una corriente eléctrica pasa a través de ellos.
David Carroll muestra su nueva luz en base a capas de plástico que bautizó con el nombre de Fipel. |
El inventor de este sistema, David Carroll, es profesor de física en la Universidad Wake Forest de Carolina del Norte, Estados Unidos. Carroll explicó que esta nueva lámpara plástica puede moldearse en cualquier forma y produce una luz de mejor calidad que la de los tubos fluorescentes. Según él, el problema de los actuales tubos es que “no se acomodan al ojo humano”.
“Las personas se quejan de dolores de cabeza, y la razón es que el contenido espectral de esta luz no coincide con la del Sol. Nuestro sistema puede adaptarse al espectro solar perfectamente”. “Lo que quiero decir es que es más brillante que los bombillas y puedo producirlos con el tinte que quieran”.
Ahorro energético
Cerca de 19% del consumo global de electricidad se destina a la iluminación. Por eso, el uso de lámparas de bajo consumo supondría ahorrar el equivalente a la energía generada por 600 plantas eléctricas.
En los últimos años, varios han sido los intentos de fabricar lámparas de bajo consumo. Las lámparas LED (Light Emitting Diodes) pasaron de ser luces indicadoras en aparatos electrónicos a ser ampliamente utilizadas por su brillo y eficiencia, empleadas sobre todo en grandes edificios.
Otro gran paso fueron las bombillas orgánicas LED (OLEDs), que además de una mayor eficiencia prometen una mejor luz que las lámparas incandescentes. Su gran ventaja sobre las LED es que pueden adaptarse a diversas formas, incluyendo pantallas de televisión de alta definición. Pero el profesor Carroll cree que las luces OLED no cumplen determinados requisitos.
“No duran mucho y no son muy brillantes”, apuntó. “Hay un límite en cuánto brillo puedes obtener con ellas. Si les pasas demasiada corriente se funden”.
Luz sin calor
La nueva luz Fipel es dos veces más eficiente que la de los tubos fluorescentes. |
Sin embargo, Carroll afirma que las lámparas de su creación Fipel resuelven estos problemas. “Lo que hemos descubierto es una nueva forma de hacer luz más que calor. Nuestras lámparas no contienen mercurio, no tienen sustancias químicas cáusticas y no se rompen, porque no están hechas de vidrio”.
El científico dice que la nueva luz es de fabricación barata y tiene un “socio corporativo” interesado en producirla. Cree que la primera serie saldrá a la venta en 2013.
También tiene fe en la durabilidad de estas lámparas. Según él, la que tiene en su laboratorio ha durado casi una década.
Les deseo mucha suerte en su empreño y comercialización. Sería estupendo poder erradicar el peligroso mercurio de los puntos de luz necesarios para nuestros quehaceres diarios.
ResponderEliminar¡Gracias!