Durante
la Segunda Guerra Mundial, el 8 de abril de 1940, el destructor HMS Glowworm (H
92) es hundido a cañonazos al noreste de la isla de Freya, Noruega, después de chocar contra el crucero pesado alemán Admiral Hipper.
Con el hundimiento del crucero inglés Glowworm murieron 111 tripulantes, entre ellos, su capitán. |
El
destructor inglés Glowworm abrió fuego contra los destructores alemanes
que transportaban tropas en el marco de la Operación
Weserübung, quienes rápidamente dieron aviso al buque que encabezaba su
formación, el crucero pesado Admiral Hipper. Los navíos germanos
intentaron retirarse al tiempo que llegaba el Admiral Hipper que tenía 202,8 metros de eslora y con plena carga podía desplazar 18.500 toneladas.
El crucero alemán Admiral Hipper saliendo de un fiordo. |
El fin del destructor Glowworm bajo el fuego de los cañones de 203 mm del Admiral Hipper. |
Imagen del destructor alemán Admiral Hipper. |
Tras el hundimiento, el Admiral
Hipper se aproximó al lugar para intentar rescatar a su tripulante caído al
mar y a los supervivientes del Glowworm. El marinero alemán no fue
hallado, pero fueron rescatados 40
británicos, seis de los cuales murieron después a causa de sus heridas. 111 británicos murieron en el mar con el
barco. El teniente Ramsay, oficial británico de mayor rango que sobrevivió,
dijo a sus rescatadores que ni el timón principal ni el de emergencia pudieron
ser maniobrados durante el combate, por lo que el choque entre ambos navíos fue
completamente accidental. Según la versión alemana el Glowworm sólo
disparó 4 torpedos, pero los británicos afirmaron que fueron disparados contra
el crucero alemán los ocho torpedos con que contaba su destructor. Las pruebas
fotográficas tomadas tras la colisión confirmaron que, en efecto, el Glowworm
había lanzado todos sus torpedos.
El capitán Hellmuth G. Heye, al mando del Admiral Hipper hundió al crucero inglés. |
Durante su último combate el HMS
Glowworm rompió su silencio radiofónico para informar al Almirantazgo
Británico de su situación. Aunque no pudo completar su transmisión, el
Almirantazgo supo que su destructor había entablado combate con un crucero
alemán, por lo que ordenó al convoy liderado por el crucero de batalla HMS Renown que abandonara su
puesto en Vestfjords (Noruega) y se dirigiera hacia la última posición indicada
por el Glowworm. Mientras tanto, el Admiral Hipper había
abandonado el lugar y seguido camino a su misión en Trondheim.
El comandante del HMS Glowworm,
capitán de corbeta Broadmead Roope, se ahogó cuando se quedó sin fuerzas para
agarrase a un cabo en el costado del crucero alemán, recibió a título póstumo
la prestigiosa Cruz de la Victoria (una ironía porque perdió su buque y el
barco enemigo siguió rumbo a Noruega), convirtiéndose así en el primero en
recibirla en la Segunda Guerra Mundial. Esta
distinción fue concedida en parte por la recomendación del capitán del Admiral
Hipper Hellmuth Heye, que a través de la Cruz Roja escribió a las
autoridades británicas para hacerles saber el heroico desempeño del capitán del
destructor en el combate contra un buque muy superior.
No hay comentarios:
Publicar un comentario