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martes, 23 de diciembre de 2014

HALLAN NUEVAS ESPECIES A UNA PROFUNDIDAD RÉCORD DE MÁS DE 8.000 METROS EN LA FOSA DE LAS MARIANAS

Además, el equipo obtuvo las muestras más profundas de roca jamás recuperadas de la vertiente interna de la Fosa, que representan algunas de las primeras erupciones volcánicas.

El Monte Everest es más pequeño que la
profundidad de la Fosa de las Islas Marianas.
La Fosa de las Marianas, ubicada en el Pacífico Occidental cerca de Guam, alberga el lugar más profundo de la Tierra, el Abismo Challenger, tan misterioso como atractivo, que grandes expediciones han intentado conquistar. La última en dirigirse a esa zona, del Instituto Oceánico Schmidt a bordo de un buque de investigación de nombre Falkor, ha descubierto nuevas especies de peces a profundidades nunca antes alcanzadas de 8.000 metros bajo las aguas. Hasta ahora, no se habían visto peces por debajo de 7.700 metros.

Este pez de entre 60 y 70 cm fue encontrado
a una profundidad de 6000 metros.
En lugar de centrarse en el punto más profundo de las Marianas, la expedición Hadal Ecoxystem Studies (Hades), se fijó en diferentes profundidades, con el objetivo de mejorar la comprensión de la interacción entre la vida y los procesos geológicos en toda la zona. Partió de otras investigaciones de aguas profundas mediante el muestreo de un amplio espectro de entornos, utilizando cinco vehículos especiales que pueden alcanzar profundidades específicamente dirigidas desde 5.000 a 10.600 metros.

Ubicación de la Fosa de las Marianas.
«Muchos estudios se han apresurado a viajar a la parte inferior de la zanja, pero desde un punto de vista ecológico es muy limitante. Es como tratar de entender un ecosistema de montaña con sólo mirar en su cumbre», explica Jeff Drazen, codirector científico de la expedición.

La expedición rompió varios récords de los peces vivos capturados o vistos en vídeo a mayor profundidad. A 8.143 metros se descubrió una variedad completamente desconocida de pez caracol, lo que sorprendió a los científicos cuando se encontró varias veces durante los experimentos del fondo marino. El pez blanco translúcido tenía aletas en forma de alas anchas y una cola de anguila, y lentamente se deslizó sobre la parte inferior. Hasta ahora, no se habían visto peces por debajo de 7.700 metros de profundidad.

Anfípodo gigante hallado a 5000
metros de profundidad en las Marianas.
Además, el equipo obtuvo las muestras más profundas de roca jamás recuperadas de la vertiente interna de la Fosa, que representan algunas de las primeras erupciones volcánicas del arco de las Islas Marianas. Estas rocas pueden proporcionar información importante sobre la geología del sistema de trincheras.

Los resultados de esta investigación ayudarán a responder preguntas importantes sobre el hábitat más grande y menos explorado de la Tierra, incluyendo los organismos viven allí (peces, anfípodos que se pensaba que no existían a estas profundidades) y cómo la vida se adapta a estas condiciones extremas, así como la cantidad de carbono en la atmósfera que alcanza las profundidades del mar y si afecta a las cadenas de alimentación.

Pez blanco traslúcido captado a 8.143
metros de profundidad.
Las nuevas especies descubiertas en esta expedición proporcionarán una idea de las adaptaciones fisiológicas de los animales a este entorno de alta presión.

«Rara vez obtenemos una perspectiva completa de entornos únicos profundos del océano. Las preguntas que los científicos serán capaces de responder después de este viaje allanarán el camino para una mejor comprensión de las profundidades del mar, que no está exento del impacto humano», dice Wendy Schmidt, vicepresidenta del Instituto Oceánico Schmidt.

Al contrario de lo que pueda parecer, esta cicatriz de 2.550 km de longitud que alcanza los 11.000 km de profundidad -el monte Everest podría introducirse dentro- en el Abismo Challenger, está repleta de vida. La presión allí es casi 1.100 veces superior a la que existe en la superficie.

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