En una audaz operación, seis
barchini o lanchas explosivas italianas lograron deslizarse a
través de las tres líneas de defensas portuarias y evitar las luces
de búsqueda, adentrándose al interior de la bahía de Suda, al norte de Creta.
El teniente de Navío Luiggi Faggioni comandaba las seis lanchas explosivas. |
La acción
comenzó la noche del 25 de marzo de 1941. Dos destructores italianos, el RMI Sella y el RMI Crispi trasportaron a
los seis MTM Barchini lo más cerca
posible del objetivo. Con los nervios a flor de piel, los seis pilotos estaban preparados para comenzar el ataque.
Mandaba la operación el Teniente de Navío Luigi Faggioni. Además de Faggioni, los
Barchini iban pilotados por el Subteniente de Navío Angelo Cabrini, el Cabo Artillero Alessio de Vito, el Cabo de Máquinas Tullio Tedeschi, el Cabo Segundo Lino Becati y el Sargento Emilio
Barberi.
Imagen de un MTM Barchini. |
Ahora todo dependía de la situación de los navíos ingleses en la
bahía. Las naves podían haber salido por la tarde. Pero durante la travesía
llegaron por radio las últimas noticias sobre los partes de reconocimientos
aéreos. No había ningún cambio en la bahía.
Los destructores
se detienen en alta mar y descienden las seis lanchas a las 23:30 cuando los destructores
se encontraban a 10 millas de Suda. Están a diez minutos al este del Cabo Tripiti y para
embocar la Bahía de Suda, tendrán que marchar dos horas a una velocidad de 26
nudos.
Mapa con la posición de la bahía de Suda y la dirección del ataque italiano. |
El procedimiento establecido es que el piloto del MTM
dirija su embarcación de asalto en un rumbo de colisión contra su objetivo y
salte al agua unos cien metros antes del impacto y de la detonación de la
cabeza explosiva. Así, aprovechándose de su velocidad y
su maniobrabilidad, los seis barchini
han logrado deslizarse a través de las tres líneas de defensas
portuarias y evitar las luces de búsqueda, adentrándose al interior de la
bahía a las 04:45.
Los MTM Barchini
(Motoscafo
da turismo modificato) navegaron en
formación de rombo, con el de Faggioni a la cabeza. Iban a
distancia de diez metros y hacían un ruido infernal, lanzados a toda velocidad,
como lanchas de carreras. Además, la distancia entre el punto de destino, y del
lugar donde habían dejado a los Barchini, era grande y debería ser recorrida
antes del alba. Al llegar al objetivo, se redujo la velocidad, y se abandonó la
formación de rombo, para formar en línea (eran las dos de la mañana). Después
de algunas maniobras de ajustamiento, el equipo se encontró en la posición
mejor para efectuar el ataque. Ahora lo único que quedaba hacer era detectar bien las posiciones de las naves y
esperar el momento más favorable para atacar.
Mapa de la bahía de Suda con los movimientos de los italianos. Clic para aumentarlo. |
El crucero HMS York encallado y escorado. |
Foto de la bahía de Suda momentos después del audaz ataque naval italiano. |
El buque cisterna Pericles quedó gravemente dañado. |
Otro punto de vista del agonizante crucero HMS York. |
Después de los ataques, los tripulantes empezaron a nadar, en las tinieblas, hacia el punto de reunión. Llegados a tierra vieron que las explosiones habían sido de número mayor a las programadas: habían explotado también algunas minas colocadas en el puerto. Eran las 07.00 cuando fueron capturados y conducidos al Comando de Policía Británico.
El crucero HMS Bonaventure, hundido el 31 de marzo de 1941 por el submarino italiano Ambra. |
Este primer éxito italiano continuará con el
hundimiento del crucero liviano HMS Bonaventure (31), que
será hundido el 31
de marzo de 1941 por el submarino italiano Ambra al sur-sureste de Creta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario