Estudiantes del Movimiento Sur de la Universidad Nacional de Río Cuarto, provincia de Córdoba, se movilizaron en contra la llegada de la multinacional Monsanto que pretende establecerse en esa rica zona agrícola del sur de Córdoba.
“Nos movilizamos al Consejo Superior con la intención de que la Universidad se expida en contra de la instalación de este biopirata en nuestra ciudad”, señalaron en un comunicado.
Fuera Monsanto de Río Cuarto, de Córdoba y de la Argentina. |
Los militantes recordaron que “la Universidad rechazó los fondos de la Mega minería y también debe salir a expresarse ante la entrada de esta megaempresa”.
“Seguir la lucha contra el modelo extractivista contaminante y salir a generar alternativas sustentables de desarrollo es nuestro objetivo”, indicaron.
Esta no la primera protesta contra Monsanto en Río Cuarto, ya hubo otra con gran participación de los vecinos. Ante lo cual, el ministro de Agricultura de Córdoba, Néstor Scalerandi, salió a defender a la empresa transgénica declarando: “Me hace pensar que están en el ostracismo, en la Edad Media. Monsanto en el mundo les dio de comer a miles de millones de personas. La sociedad quiere respuestas concretas, no fundamentalistas.” Y también cargó sobre quienes marcharon: “¿Cómo saben que (Monsanto) va a ser contaminante? Estudios concretos no hay nada”.
200 ratas fueron alimentadas durante dos años en Francia con maíz transgénico de Monsanto y desarrollaron tumores al 13º mes del experimento. |
Por lo visto, el que vive en la Edad Media, es el ministro de Agricultura de Córdoba, que está completamente desactualizado sobre las investigaciones desarrolladas por un equipo de la universidad francesa de Caen comandado por el biólogo molecular Gilles Eric Seralini y publicada en la revista especializada Food and Chemical Toxicology, que encontró que unas 200 ratas de laboratorio a las que se les suministró durante dos años (la vida entera de esos animales) distintas dosis de maíz NK 603 de Monsanto presentaron tumores del tamaño de una pelota de ping pong.
Comparadas con otros cobayos testigo a los que no se los alimentó con el organismo genéticamente modificado sino con maíz convencional, las ratas "transgenizadas” ya tenían malformaciones graves al décimo tercer mes de la experiencia. En las hembras aparecieron tumores mamarios que alcanzaron hasta una cuarta parte de su peso. En los machos, los órganos depuradores –riñones e hígado- fueron afectados por anomalías severas con una frecuencia entre 2 y 5 veces mayor que en los roedores no sometidos al cereal genéticamente modificado.
Otras protestas en Córdoba
El 24 de octubre de este año también se movilizaron contra ésta multinacional vecinos de la ciudad de Malvinas Argentinas sobre la Ruta 19 para rechazar la instalación de Monsanto en la zona. Es una localidad del Departamento Colón, provincia de Córdoba. La ciudad tiene 12.484 habitantes y está ubicada 14 kilómetros al noreste de la ciudad de Córdoba. Los vecinos entregaron al intendente Daniel Arzani un informe realizado por Raúl Montenegro sobre los "efectos negativos" que generaría el funcionamiento de la multinacional en la ciudad.
Vecinos de la ciudad de Malvinas Argentinas durante la protesta contra Monsanto. |
Esta es la tercera movilización masiva que hacen los vecinos en rechazo a la puesta en funcionamiento de una planta de Monsanto en el ejido municipal. Las anteriores fueron el 17 de setiembre y el 5 de octubre. Sin embargo Monsanto anunció que inaugurará la planta en diciembre de 2013.
Al respecto,
"No a Monsanto en Córdoba y América Latina", cartel en el alambrado donde se va a instalar Monsanto en la localidad de Malvinas Argentinas. |
Los vecinos insistieron en que se realice un plebiscito "para que el pueblo defina si quiere a la empresa en la zona". Además solicitaron un estudio de salud en vecinos de la zona con relación a las fumigaciones que se desarrollan en el sector.
Monsanto quiere establecerse definitivamente en la Argentina y en junio de 2012, la presidenta Cristina F. de Kirchner en Nueva York, mantuvo una reunión con directivos de Monsanto, éstos le comunicaron su plan de inversiones en Argentina por 1.670 millones de pesos.
Luego la primera mandataria alegremente anunció la instalación de la planta de semillas de maíz transgénicas de Monsanto en Malvinas Argentinas y una estación experimental en Río Cuarto. El emprendimiento cuenta con el apoyo del gobernador, José Manuel de la Sota, y del intendente de Malvinas Argentinas, Daniel Arzani.
En 1956 la empresa estadounidense Monsanto ingresó a la Argentina como productora de plásticos y en 1978 empezó sus actividades de acondicionamiento de semillas híbridas de maíz en Pergamino, provincia de Buenos Aires.
Actualmente posee en nuestro país 5 plantas: dos procesadoras de semillas (Planta María Eugenia en Rojas, Planta Pergamino); una productora de herbicidas (Planta Zárate) y dos estaciones experimentales (Camet, Fontezuela).
Monsanto poseerá en la Argentina ocho plantas para sus perversos experimentos transgénicos. |
Ahora pretende instalar una tercera fábrica en la provincia de Córdoba y dos nuevas estaciones experimentales, una en Río Cuarto y otra en Tucumán, con lo cual serían 8 plantas en el país. La sede central de Monsanto está en el barrio de Creve Coeur en Saint Louis, en el estado de Missouri (Estados Unidos).
Monsanto es una empresa que tiene pésimos antecedentes industriales. Participó del proceso de fabricación de las primeras bombas atómicas, produjo armas químicas que se usaron en Vietnam y violó normas de todo tipo en muchos países, todo ello en nombre de sus ganancias. De allí que Natural Society, una reconocida organización no gubernamental de Estados Unidos, declarara a Monsanto "la peor empresa del año 2011" tras considerar que amenazaba "la salud humana y el ambiente".
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