La huella tiene
como mínimo 10 millones de años. Ningún hombre de ciencia quiso investigarla.
Esta área protegida de los Estados Unidos tiene 1900 Km². |
En enero de 2002, James A. Snyder, un habitante de la ciudad de Ramona, en el
este del condado de San Diego, descubrió
una huella fósil de un pie gigante, durante un paseo en el Bosque Nacional de Cleveland (Cleveland National Forest).
Esta área
protegida fue creada en 1908 en el sur de California por el presidente Teodoro Roosevelt. Comprende 1.900 km², distribuidos en tres
condados: Orange, Riverside y San Diego. La mayor parte del terreno es chaparral,
con unas pocas áreas ribereñas. Hay bosques en las cimas superiores de las
elevaciones de las montañas. Está zona se encuentra muy cerca de la ciudad de San
Diego.
La huella fósil gigantesca descubierta en 2002 por James Snyder es de un ser de unos 4 metros de estatura. |
Como
dato curioso, en este parque se encuentra ubicado el famoso
Observatorio Astronómico de Monte Palomar, situado a 1712 metros de altura, gestionado
por el Instituto Tecnológico de California.
Al
buscar oro en el macizo de Gowers, James Snyder salió de los
senderos trillados y encontró una huella gigante de pie fosilizada
en la roca granítica de lo
que fue sin duda un río, hace mucho tiempo. La huella es de un pie derecho, tiene 18
pulgadas de largo por 8 de ancho. Si una pulgada son 2,54
centímetros, por 18 pulgadas da como resultado 45,72 centímetros. Lo cual significa que el gigante que imprimió la huella, debía medir unos 4 metros de
altura.
Ubicación de la ciudad de Ramona y del Cleveland National Forest. |
Hay
que tener en cuenta que la formación
geológica del área es de rocas de granito y remanentes de rocas más antiguas.
Hace aproximadamente 10 millones de años atrás, estas montañas sufrieron una
elevación. Por tanto, para que quede
plasmada una huella de un pie en el lecho de un río y quede petrificada, tuvo
que suceder como mínimo, en algún momento hace 10 millones de años. Por
supuesto, para la historia manipulada que nos enseñan, en ese tiempo, no existía
la humanidad.
Snyder,
llamó por teléfono a varios científicos, pensando que podría tratarse de la huella de un ancestro de los “Bigfoot”, o “Pie Grande”,
o Sasquatch,
ser antropomorfo que ha sido avistado muchas veces en zonas boscosas de California y de otros sitios de los Estados Unidos.
La huella fue tapa de la revista San Diego Reader. |
Los “expertos” le
respondieron telefónicamente que se trataba de un producto de la “erosión”, de
una huella de un “oso”, o daban cualquier excusa para no ir al lugar, diciéndole
que nunca existieron simios gigantes en América del Norte.
Los únicos medios que le prestaron atención fueron la revista San Diego Reader y el canal
de televisión local, Canal 8, que difundieron su descubrimiento en el mes de
febrero de 2002.
A continuación, el propio Snyder escribió en inglés
su descubrimiento y con quienes conversó. Puede leerse haciendo clic aquí.
En
todos estos años, comenta Snyder, ningún científico se acercó para preguntarle
la ubicación exacta de la huella. Y él apreciaría que los hombres de Ciencia
hicieran el esfuerzo de desplazarse hasta este lugar perdido, a más de una hora y media de caminata, tras
unos montes difíciles de acceso, para examinar detenidamente esta huella de
millones de años que revolucionaría todo lo que se ha enseñado hasta hoy sobre
la presencia humana en el planeta.
Por Alberto Seoane
Para más información adicional lea:
No hay comentarios:
Publicar un comentario