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jueves, 27 de junio de 2013

HENRY KISSINGER DIJO QUE “LLEGÓ EL MOMENTO DE CONSTRUIR UN ORDEN MUNDIAL GLOBAL POR PRIMERA VEZ EN LA HISTORIA”

Le propuso a China que se una con Estados Unidos para crear un “Nuevo Orden Mundial”.

La sede en Houston, Texas, de la
organización Asia Society, donde disertó
Kissinger, el 14 de marzo de 2013
.
Curiosamente, la noticia no fue difundida por los medios masivos de incomunicación sino por las redes sociales de Internet, esa es la razón por la que nos enteramos hace unos días.

El jueves 14 de marzo de 2013, en la sede de la organización Asia Society, ubicada en Houston, Texas, el eterno conspirador Henry Kissinger, brindó una charla ante un selecto grupo de personas.

Henry A. Kissinger, fue el 56º Secretario de Estado y paradójicamente, con sus manos manchadas de sangre de decenas de miles de inocentes en todo el mundo, recibió el Premio Nobel de la Paz en 1973, un verdadero desacierto.

Qué es Asia Society
La denominada Sociedad de Asia o Asia Society se ve representada como una organización no gubernamental sin fines de lucro que tiene por objetivo difundir y compartir la historia de Asia al mundo y estrechar los lazos con los Estados Unidos. La sociedad cuenta con diversos centros en Estados Unidos en las ciudades de Washington D.C. Los Ángeles, San Francisco y Houston, también poseen sedes en otros países y ciudades como Hong Kong, Shanghái, Seúl, Manila, Mumbai, Sidney y Melbourne, todas ellas administradas por la sociedad que reside en Nueva York.

Logo de la Sociedad de Asia, fundada en 1956
por John D. Rockefeller III.
La Asia Society fue fundada en 1956 por John Davison Rockefeller III (1906-1978), nieto del fundador de la dinastía Rockefeller. Tiene un museo en el número 725 de Park Avenue de Nueva York, la mayoría de las obras que contiene el museo fueron donadas por su fundador.

Asia Society, en 2011, designó por primera vez en su historia dos Co-Presidentes en ambos lados del Océano Pacífico, con el fin de reflejar el crecimiento de la interdependencia global y de las asociaciones entre regiones.

Uno de los co Presidentes es Henrietta Holsman Fore, líder de negocios y ex funcionaria de alto rango del gobierno estadounidense, quien fuera también la primera mujer en ocupar el cargo de Directora de la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos (USAID, por sus siglas en inglés), e integrante del directorio de Exxon Mobil Corporation. El otro integrante es Ronnie C. Chan, uno de los principales desarrolladores inmobiliarios, inversores y filántropos de Hong Kong y China, asumieron la presidencia conjunta de la Junta Directiva de Asia Society, a partir del 10 de junio de 2011. Holsman Fore es la primera mujer en tener tan alto cargo y Chan es el primer asiático en liderar la organización.

Una vista del complejo que Asia Society
posee en Hong Kong.
Otros integrantes de esta organización son: Betsy Z. Cohen, Lewis B. Kaden, Harold McGraw III, John S. Wadsworth, Jr., Wahid Hamid, Harold J. Newman, Lulu C. Wang, Claudine M. Malone, K.S. (Sonny) Kalsi, Purnendu Chatterjee y Thomas B. McLain.

En 2012 marcó una gran expansión con la apertura de un multimillonario complejo en Hong Kong, el 9 de febrero. El 6 de mayo inauguró una construcción costosísima en Houston, Texas. La institución tiene influencia en líderes y personalidades de 50 países de Asia.

Las palabras de Henry Kissinger
En el vídeo siguiente, Henry Kissinger, el eterno conspirador, también socio del Club Bilderberg, le pide a los Estados Unidos y al gobierno chino que trabajen juntos para crear un gobierno mundial totalitario. En un discurso ofrecido ante la Asia Society el 14 de marzo y subido a Internet el 21 de mayo de 2013, el ex secretario de Estado Henry Kissinger ha dicho lo que sigue: “El desafío es saber cómo construir un orden mundial global por primera vez en la Historia. Hablamos mucho de comunidad mundial pero el hecho real es que nunca ha habido una comunidad mundial antes", y sugiere a continuación que China y Estados Unidos colaboren en esa meta. (A partir del minuto 3 del video).

Henry Kissinger en la reunión
del Foro Económico Mundial
2008 en Nueva Delhi, India.
Se nota que quienes mueven los hilos del mundo ya han calculado que contando solo con el poder de los Estados Unidos nunca podrán dominar al planeta y ahora “han descubierto la necesidad de trabajar juntos”, con China, para solucionar los problemas.

La razón por la que Kissinger quiere enlazar con China se debe a que tiene su propio sistema monetario que no está controlada por la Reserva Federal. El suministro de yuanes no está regulado por los bancos globalizadores. Además China es el principal país poseedor de bonos de  los Estados Unidos, el otro país es Japón.

Por su lado, David Rockefeller, otro integrante y fundador del Grupo Bilderberg, ya rindió en su día homenaje a líder comunista Mao Zedong (Mao Tse-Tung), el exterminador masivo más completo del siglo XX, responsable de la muerte de entre 50 a 78 millones de chinos, según distintas fuentes. Rockefeller ve a Mao como un líder político ideal y a la revolución comunista y sus numerosas purgas políticas como un modelo de gobierno mundial.

David Rockefeller es un admirador de 
Mao Zedong, el líder chino que mató 
de 50 a 78 millones de chinos.
“Sea cual fuera el precio de la Revolución China (se refiere a los millones de muertos), ésta ha logrado no solo producir una administración gubernamental más eficaz y motivada, sino también suscitar una gran moralidad y una meta comunitaria. La experiencia social de China bajo la batuta de Mao es uno de los más grandes éxitos de la historia humana”. (David Rockefeller en el New York Times, 10 de agosto 1973).

Rockefeller se deshizo en felicitaciones melosas sobre Mao y los comunistas tres años antes del final de la Revolución Cultural en China. El fiel favorito de Rockefeller, Henry Kissinger cree que ha llegado el momento de exportar al resto del mundo lo que Mao hizo en China. Es por eso que pidió a la Asia Society: “Llegó el momento de construir un orden mundial global por primera vez en la historia”.

Quienes planean fríamente el Nuevo Orden Mundial (CFR, Bilderberg, Trilateral Comission, Bohemian Grove, Illuminati, etc.) saben que nunca van a conseguir dominar al mundo si tienen que hacer una guerra con China, por ende, tratan de asociarla a ellos y luego de ser infiltrada, podrán corromper a funcionarios chinos, sobornarlos, extorsionarlos y ya nunca será más la China, será otra cosa.

Kissinger, el eterno conspirador
Henry Kissinger, cuyo verdadero nombre en unas biografías es Heinz Alfred Meyer Stern y en otras Abraham ben Elazar, nació el 27 de mayo de 1923 en la localidad alemana de Fürth (Baviera). Es un político estadounidense de origen judío considerado por muchos uno de los cerebros del Nuevo Orden Mundial. Se le sindica también como uno de los más grandes instigadores de golpes de Estado y de genocidios en el mundo, durante la segunda mitad del siglo XX.

Henry Kissinger fue asesor del
gobernador de Nueva York,
Nelson Rockefeller.
En 1938, emigró a los Estados Unidos con su familia teniendo sólo 15 años de edad. Cinco años más tarde adoptaría la nacionalidad americana. En 1947 obtuvo una beca del Fondo Rockefeller merced a la cual cursó estudios y se graduó en Ciencias Políticas en la Universidad de Harvard, reputado centro fabiano del Establishment en el que posteriormente desempeñaría varios cargos docentes y directivos.

En 1955, Kissinger se convierte en Asesor del Consejo Nacional de Seguridad y de la Junta de Coordinación de Operaciones de Seguridad de los Estados Unidos. En 1955 y 1956, fue también Director de Estudio en las Armas Nucleares y la política exterior en el Consejo de Relaciones Exteriores o CFR.

Se desempeñó en el Partido Republicano como consultor de varios organismos del Gobierno, incluyendo la Oficina de Investigación de Operaciones, el Control de armas y desarme y el Departamento de Estado y asesor de la Corporación RAND desde 1951, una compañía de desarrollo industrial, tecnológico y armamentístico.

Deseoso de tener una mayor influencia en la política norteamericana, Kissinger fue partidario y asesor de Nelson Rockefeller, gobernador de Nueva York, que buscó la nominación del Partido Republicano para Presidente en 1960, 1964 y 1968, sin éxito.

El presidente Richard Nixon y Kissinger.
Luego pasó a asesorar al candidato a presidente Richard Nixon, que perdió ante John F. Kennedy, incluso en el gobierno de Kennedy tuvo cargo como Asesor del Gobierno, pero eliminados los dos grandes obstáculos que eran John y su hermano Robert (ambos asesinados), Nixon fue presidente en 1968. Convencido de las habilidades de  Kissinger, lo nombra Consejero de Seguridad Nacional, dejándole así la puerta abierta para comenzar el epítome de su carrera política y poniéndolo al frente de todo lo referente a orden interno, seguridad y demás cuestiones referentes al gobierno.

Kissinger, pasará a desempeñar a plenitud su cargo, y se ocupará de organizar todo lo referente a la defensa y se convertirá en el asesor más cercano del presidente Nixon, quien frecuentemente hacía cambios completos de gabinetes y de directivas pero era incapaz de destituir a Kissinger, que cada día reunía más poder. Cuando Nixon fue reelecto en 1972 le otorgó a Kissinger, la Secretaría de Estado de los Estados Unidos, puesto que Kissinger anhelaba desde hacía años.

Ejerció ese cargo desde 1973 hasta 1977. Su participación en la vida pública estadounidense le permitió desempeñarse ininterrumpidamente a lo largo del mandato de cuatro presidentes norteamericanos diversos cometidos políticos de alto nivel. Tanto poder acumulado en una sola persona le permitió decir la siguiente frase: "El poder es el último afrodisíaco".

El genocida
Desde su puesto de poder planificó el asesinato una gran cantidad de militantes de izquierda en Chile, y posteriormente, en la Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay, así como de promover y respaldar a las propias dictaduras y desarrollar la Academia de las Américas, y la Operación Cóndor. También bombardeos generalizados en Vietnam, Camboya y Laos.

Aviones lanzando el agente naranja en Vietnam.
Camboya: El bombardeo secreto estadounidense de Camboya en 1970 causó la muerte de unos 600.000 combatientes y civiles. El bombardeo a Camboya contribuyó a desestabilizar el país, ya asolado por la guerra civil que llevó al triunfo a los insurgentes del Khmer Rojo y a un nuevo genocidio.

Laos: Personalmente Kissinger diseñó el llamado menú de la muerte que consistía en bombardeos masivos durante varias horas del día: eran cuatro raciones diarias de plomo parejo, servidos con los irónicos nombres de “desayuno”, “almuerzo”, “cena” y “postre”, los cuales en menos de un año causaron casi un millón de muertos, la mayoría civil, “al atacar con 4,5 millones de toneladas de explosivos (sobre Vietnam, Camboya y Laos), más del doble de toda la carga utilizada en la Segunda Guerra Mundial”. En Laos estos bombardeos masivos dejaron 350.000 muertos. Esto sin contar el número de civiles mutilados o heridos a causa de los bombardeos.

Tanque norteamericano en Vietnam.
Vietnam: Kissinger fue responsable de la "destrucción premeditada y generalizada del medio ambiente utilizando defoliantes químicos como el Agente Naranja", como Peter Tatchell escribió en The Guardian. "Estos son crímenes de guerra según la Convención de Ginebra de 1957". Los principales proveedores eran Dow Chemical, Thompson, Diamond, Monsanto, Hercules y Uniroyal. Fuentes vietnamitas afirman que se vertieron 80 millones de litros de este producto tóxico en un espacio de 10 años no solo sobre Vietnam, sino también en Camboya y en Laos. Las cifras de civiles vietnamitas muertos hasta la retirada norteamericana en 1973, rondan el 1.300.000 a 2 millones.

Bangladesh: Bajo la dirección de Kissinger, el Gobierno de Estados Unidos apoyó a Pakistán en la Guerra de liberación de Bangladesh en 1971. La Guerra indo-pakistaní de 1971, es también uno de los flancos de donde Kissinger recibe mayor cantidad de críticas, debido no a la guerra, ni a sus acciones "per se", sino a la actitud que tomó al respecto, criticando fuertemente tanto en público como en privado a la primera ministra hindú Indira Gandhi, donde Kissinger habría llegado a insultarla, en reuniones privadas con Richard Nixon, además de tener una actitud despreciativa hacia la población india en general, tratándolos como un "raza inferior". La “liberación” de Bangladesh provocó un genocidio de 500.000 personas, tras el golpe de Estado del general Yahya Khan, armado, apoyado y financiado por Kissinger.

El Palacio de la Moneda en Santiago
de Chile es atacado por los militares
el 11 de setiembre de 1973.
Chile: El 11 de setiembre de 1973, Salvador Allende, presidente constitucional chileno murió durante un golpe de estado lanzado por el Comandante en Jefe de Ejército Augusto Pinochet, quien era masón y se convirtió en Presidente de facto de Chile y que ejercería una dictadura sobre el país, durante 17 años. Un documento publicado por la CIA en 2000 titulado "CIA, Actividades en Chile" reveló que la CIA apoyó activamente la junta militar tras el derrocamiento de Allende y que tenía muchos de los oficiales de Pinochet en pagos contactos de la CIA, a pesar de que muchos eran conocidos para ser involucrados en violaciones de los derechos humanos. La CIA operaba en Chile autorizada por Kissinger, que era presidente del poderoso Comité 40 una organización de alto nivel y al lado de representantes del Departamento del Estado, de la CIA y del Pentágono, que tomaban decisiones y medidas acerca de las situaciones relacionadas con el comunismo nacional e internacional.

Argentina: En ocasión del golpe de Estado de Argentina, el 24 de marzo de 1976, Kissinger alentó y apoyó a la Junta Militar a que tomara el poder. Lo han acusado de complicidad y del estímulo en la eliminación y "desaparición" sistemática de miles de opositores cometidas por la Junta Militar de Argentina. La aceptación de la "guerra sucia" argentina por parte de Kissinger (quien en aquel momento era Secretario de Estado) ha sido confirmada oficialmente por archivos desclasificados del Archivo Nacional de Seguridad de los Estados Unidos.

Henry Kissinger y el dictador chileno
Augusto Pinochet.
Plan Cóndor: La Operación Cóndor, fue una plan de coordinación de operaciones entre las cúpulas de los regímenes dictatoriales del Cono Sur de América: Chile, Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay junto con la CIA, llevada a cabo en las décadas de 1970 y 1980.

Esta coordinación se tradujo en "el seguimiento, vigilancia, detención, interrogatorios con apremios psico-físicos, traslados entre países y desaparición o muerte de personas consideradas por dichos regímenes como 'subversivas del orden instaurado o contrarias al pensamiento político o ideológico opuesto, o no compatible con las dictaduras militares de la región'". El Plan Cóndor se constituyó en una organización clandestina internacional para la práctica del terrorismo de Estado que instrumentó el asesinato y desaparición de decenas de miles de opositores a las mencionadas dictaduras, la mayoría de ellos pertenecientes a movimientos de la izquierda política.

Se afirma, que Kissinger, habría sido el responsable o por lo menos un personaje clave en la creación, planificación y puesta en marcha del Plan Cóndor, dado que para el año en que ésta comenzó a funcionar, 1970, Kissinger ya era Consejero de Seguridad Nacional, además de que es bien sabido que gracias a él el Cono Sur, pasó a estar dominado por dictaduras y en su desempeño como Secretario de Estado, mantuvo una política eficaz en contra de cualquier intento de expansión ideológica y política de izquierda. La Operación Cóndor, se desarrolló durante más de siete años, bajo la supervisión de Kissinger.

Colombia: Durante el mandato del Frente Nacional, desde su puesto logró promover la asesoría militar al ejército de la nación suramericana por medio de asesores de la CIA en la enseñanza de técnicas de tortura y asesinato encubierto a líderes sindicales de la oposición local, en el marco de la muy célebre y odiada serie de dictaduras amparadas en el continente y conocidas por ser sostenidas desde las operaciones de asesinatos sistemáticos promovidas desde el Plan Cóndor.

Carlos Andrés Pérez, presidente
de Venezuela y Henry
Kissinger en 1976.
Venezuela: Kissinger fue asesor consejero del segundo gobierno de Carlos Andrés Pérez (1989-1993). Mientras masacraban al pueblo y corría la sangre por las calles de Caracas, los gobernantes de la cuarta república, previo pago de sus honorarios, brindaban con el genocida para celebrar por el éxito de sus primeros consejos.

Indonesia: Henry Kissinger apoyó al régimen indonesio del general Suharto, acusado del genocidio contra la población de Timor Oriental, además de estar involucrado con las actividades de este gobierno, así como también en la invasión a este país. En diciembre de 1975, Suharto discutió los planes de invasión durante una reunión con Kissinger y el Presidente Ford en la capital Indonesia de Yakarta. Ford y Kissinger dejaron en claro que las relaciones con Indonesia continuarían siendo fuertes y que no se oponían a la propuesta de anexión que trajo la muerte de 200 mil civiles a manos de Suharto. La venta de armas de Estados Unidos a Indonesia continuó, y Suharto siguió adelante con el plan de anexión. Además, Kissinger sirvió a dicho gobierno como Asesor General de Gobierno, otra acción que le ha sido tremendamente criticada.

Espía soviético
El primero de estos informes fue elaborado por Frank Capell (1907-1980), experto en cuestiones de espionaje y analista de varias revistas políticas estadounidenses, una de las cuales, The Herald of Freedom, lo publicó íntegramente en octubre de 1971. Dicho informe fue posteriormente leído en el Congreso por el diputado John Rarick, y recogido en el tomo 117 de los Informes Oficiales de Sesiones del Congreso de 28-10-71. Con arreglo al mismo, las relaciones de Henry Kissinger con varios de sus colaboradores y subordinados en el Consejo Nacional de Seguridad y en el Departamento de Estado se remontaban al período 1943-1946, durante el cual Kissinger permaneció en Alemania como integrante de las fuerzas de ocupación norteamericanas.

Kissinger siempre obedeció a
oscuros y abyectos intereses.
Sus estudios se vieron interrumpidos a principios de 1943, cuando fue reclutado por el Ejército de los Estados Unidos. Kissinger recibió su formación militar básica en el Campamento Croft en Spartanburg, Carolina del Sur, donde fue nacionalizado estadounidense a su llegada. El ejército lo asignó a la 84° División de infantería. Allí hizo amistad con Fritz Kraemer, un oficial e inmigrante de su natal Alemania, con el que estableció una gran amistad, a pesar de la diferencia de edad, además de ser quien le señaló a Kissinger su gran fluidez con el alemán, talento que Kraemer le incentivó a usar en su favor y que aprovechó para insertar al joven Henry Kissinger en la sección de Inteligencia Militar de la División, para la cual desempeñó la misión de encargarse de las tareas de inteligencia de más riesgo durante el avance estadounidense sobre Europa.

Ya en Alemania, Kissinger fue asignado a la Bekennende de la ciudad de Krefeld, debido a la falta de traductores de alemán en el personal de Inteligencia de la División. Kissinger se basó en su conocimiento de la sociedad alemana para ir destituyendo y sacando a los nazis de los cargos civiles, y así restaurar una administración civil con paisanos judíos en la ciudad, una tarea que se realizó durante 8 días.

Posteriormente, Kissinger, fue reasignado a los Cuerpos de Inteligencia, ahora con el rango de sargento. Se le colocó a cargo de un equipo en Hannover, el cual había sido asignado para hacer un seguimiento de oficiales de la Gestapo y otros saboteadores, lo que llevó a cabo con éxito, siendo condecorado con la Estrella de Bronce.

En junio de 1945, Kissinger fue nombrado comandante de un destacamento de la Comando de Inteligencia en el distrito de Bergstraße en Hesse, con la responsabilidad de "desnazificar" el distrito, para lo cual se le dio plenitud de poderes en los ámbitos civil y militar. Esto llama la atención ya que era solo un sargento.

En 1946, Kissinger fue reasignado a la Escuela de Inteligencia del Comando Europeo para ejercer como profesor y adiestrar a los nuevos cuerpos de Inteligencia Militar.

El libro de Frank Capell
donde descubre uno de
los secretos de Kissinger,
que fue espía soviético.
Frank Capell señala que pese a su escasa graduación militar (sargento), fue nombrado administrador de la ciudad de Bensheim. Fue en ese período cuando Kissinger entró en contacto con sus correligionarios Helmuth Sonnenfeld, Gunter Guillaume, agente de los servicios secretos de la Alemania del Este y más tarde secretario de Willy Brandt, y Egon Bahr, colaborador de la inteligencia soviética y futuro artífice de la Ostpolitik. Todos ellos se integrarían en una célula de espionaje en favor de la URSS, en la que el sargento Kissinger operaba bajo el seudónimo de “Bor”.

Tales imputaciones, que la Administración norteamericana se limitó a negar sin más, fueron posteriormente confirmadas por dos ex-oficiales del KGB, Golitsin y Goleniewski, así como por un completo dossier elaborado por un equipo de agentes de la CIA, en el que se revelaban todos los lazos existentes entre Kissinger y la Inteligencia soviética. El contenido de dicho dossier, archivado en su día por Stansfield Turner, director de la Agencia norteamericana y miembro del Consejo de Relaciones Exteriores, ha visto la luz recientemente gracias a un trabajo publicado por tres expertos en asuntos de espionaje, William Corson y los esposos John y Susan Trenton (Four american Spies, the wives they left behind and the KGB's crippling of American Intelligence).

Kissinger y el Sionismo
Pese al controversial contenido de los informes mencionados nada de esto empañó la carrera política de Henry Kissinger, que siguió haciendo de las suyas.

Sin la ayuda de los Estados
Unidos, Israel nunca hubiera
triunfado en la Guerra de
Yom Kippur.
El 12 de octubre de 1973, el ejército de Estados Unidos llevó a cabo la mayor operación militar aéreo de la historia para ayudar a Israel. Esta acción norteamericana fue el desencadenante de la Crisis del petróleo de 1973, que afectó a los Estados Unidos y sus aliados de Europa Occidental. Entre tanto, ahora con apoyo militar y logístico estadounidense, Israel avanzaba con una serie de excepcionales victorias militares que lo llevaban a recuperar los territorio perdidos al inicio de la guerra y ganó nuevos territorios en Siria y Egipto, incluidas las tierras al este, de los previamente capturados, de las Alturas del Golán.

Su soberbia sólo se vio momentáneamente truncada cuando la Suprema Corte Rabínica de Estados Unidos decretó en 1976 su excomunión, a raíz de las maniobras desplegadas por el entonces Secretario de Estado para maquillar las conquistas de Israel durante la Guerra del Yom Kippur. Un conflicto a cuyo desencadenamiento "preventivo" no fue ajeno el propio Kissinger, y que reportó a las arcas de sus patrocinadores, los Rockefeller, y a las multinacionales petrolíferas en general, enormes beneficios.

Con todo, el ostracismo de Kissinger, aunque severo mientras pesó sobre él la excomunión, se iba a prolongar durante poco tiempo, ya que la Corte Rabínica no tardaría en rehabilitarle en atención a las nuevas contribuciones del penado a la causa sionista.

El Informe Kissinger
Pocos meses antes de la renuncia de Richard Nixon a la presidencia, el 9 de agosto de 1974 tras el escándalo Watergate, la Secretaría de Estado comandada por Henry Kissinger entregó a la Casa Blanca el National Security Study Memo 200, un extenso análisis de la situación demográfica mundial y soluciones para la estabilidad de los intereses de Estados Unidos relacionados con los recursos naturales que alimentaban las industrias norteamericanas.

El Plan secreto del genocida
Kissinger, descubierto en
1989, proponía el aborto
global para dominar a los
países. Hoy muchos estados
aplican su plan diabólico
sin saberlo.
En el mismo, Kissinger propone un “extenso control de la población". Tal política aún sigue siendo aplicada por la “ayuda” internacional de Estados Unidos articulada principalmente por el Banco Mundial, hacia países que estén dispuestos a tomar medidas para control de natalidad. 

Es urgente que las medidas para reducir la fertilidad mundial se inicien inmediatamente y sean efectivizadas en los ’70 y ‘80, recomendaba el secretario de Estado. 

También, Kissinger no deja de lado al aborto como una solución para el control poblacional en los países subdesarrollados:

“Mientras las agencias participantes en este estudio no tengan recomendaciones específicas para proponer sobre el aborto, en las discusiones siguientes serán importantes y deberán considerarla en el contexto de una estrategia global poblacional”.


La respuesta inmediata del secretario de Estado es contundente: “Ningún país ha reducido su población sin recurrir al aborto”, agregando:


“De hecho, el aborto, legal e ilegal, se ha convertido ahora en el método de control de fertilidad más difundido en uso en el mundo de hoy”.


Las leyes recientes a favor del aborto en las democracias de Iberoamérica, lo único que están haciendo es aceptar el Plan del genocida Kissinger.

¿Debe ser el alimento considerado como un instrumento de poder nacional?, se pregunta Kissinger, a lo que no responde directamente, aunque sugiere que todo tipo de ayuda debe ajustarse a aquellos países que acepten las condiciones de reducir la tasa de natalidad y busquen la estabilidad política.

Según consta en memo escrito por Kissinger "la despoblación debería ser la más alta prioridad en la política de EE.UU. hacía el Tercer Mundo".


El documento fue desclasificado el 7 de julio de 1989, nueve años más tarde de su apertura estipulada, sale a la luz mostrando que no había perdido vigencia ni alterado el rumbo para dominar a los países. 

Kissinger en el presente
En 2001 el juez francés Roger Le Loire pidió la detención de Kissinger en un viaje que éste hizo a París, pues quiso interrogarlo por la participación de EEUU en Operación Cóndor, así como por la muerte de un ciudadano francés durante la dictadura chilena. Kissinger logró evadir la justicia francesa al escabullirse del país esa noche.

Henry Kissinger registrado en
2011 durante la secreta
reunión del Grupo Bilderberg
en St. Moritz, Suiza.
Desde que abandonara la política activa, al menos de forma oficial, la actividad de Kissinger se ha desplegado a través de sus continuos desplazamientos de un extremo a otro del planeta, como comisionado y embajador de proyectos e intereses equivalentes a los que ya representó en su época anterior. Tal actividad no se reduce al terreno de lo político, aunque frecuentemente ejerza labores de emisario especial de la Administración norteamericana, sino que, de acuerdo con su posición en la Comisión Trilateral, en el grupo Bilderberg y en otras organizaciones conspirativas se desarrolla fundamentalmente en el ámbito económico, que es el esencial y el que determina el curso de todos los demás. Ése es el terreno en el que se desenvuelve actualmente Henry Kissinger, a quien la Alta Finanza suele encomendar diversos asuntos relacionados con la deuda pública, asuntos que el eficiente tecnócrata solventa sin estridencias públicas y con pingües beneficios para sus arcas a través de su compañía de consultores Kissinger Associates, cuyos clientes son, lógicamente, los Estados deudores y las Multinacionales acreedoras.

George W. Bush, presidente de los Estados
Unidos, quiso que Kissinger encabezara la
comisión para investigar los auto-atentados
del 11S.
Vale recordar una frase de Kissinger que lo retrata tal cual es: "Lo ilegal lo hacemos de inmediato. Lo inconstitucional tarda un poco más." 

Kissinger fue designado por el gobierno de George W. Bush, para dirigir la Comisión que investigaría los auto atentados del 11 de setiembre de 2001, pero el repudio de los familiares de las víctimas hizo que se retirara de ese cargo.

A continuación, el video del 14 de marzo de 2013, donde Henry Kissinger, con una voz ronca, criminal propone en inglés, que China se una Estados Unidos para crear el “Nuevo Orden Mundial por primera vez en la historia”.

Henry Kissinger: China, the US, and a Common Challenge


1 comentario:

  1. el final de este delirio sera igual al fin del tercer reich

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