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sábado, 29 de junio de 2013

CONSTRUIRÁN 15.000 VIVIENDAS SOBRE UN CEMENTERIO VISIGODO

La Comunidad de Madrid destruirá 824 tumbas del siglo V para construir el complejo urbanístico de Los Ahijones, un nuevo barrio en las afueras de la capital española. Además de las tumbas, también se halló un taller del paleolítico que tiene entre 200 y 300 mil años.

Las 824 tumbas en Vicálvaro fueron cavadas
a 30 centímetros de la superficie.
Mientras un grupo de arqueólogos e historiadores insisten en preservar el lugar, que cubre tres hectáreas, como patrimonio histórico, desde el Gobierno se afirma que las tumbas “carecen de relevancia”.

Las obras de urbanización del barrio de Los Ahijones, en Vicálvaro, ubicado en el sureste de Madrid, avanzan sobre una necrópolis visigoda descubierta en 2010 con 824 tumbas y restos de 1.500 individuos de entre finales del siglo V y el VII.

Así quedará el nuevo barrio que se construirá
arrasando todos los restos arqueológicos
.
Las obras se paralizaron en 2010 pero ahora, en 2013, esa historia llega a su fin: una vez excavado, el Gobierno regional ha decidido destruir el descubrimiento porque “carece de relevancia para conservarlo”.

Hace tres años, el Gobierno autorizó una intervención arqueológica y ordenó excavar el área, de tres hectáreas, extrayendo y documentando los restos. Sin embargo, el yacimiento no se protegerá porque se le dará prioridad a construir edificios de departamentos. Los restos metálicos y cerámicos hallados fueron trasladados al Museo Arqueológico regional en Alcalá de Henares. De hecho, los huesos humanos se encuentran a la espera de decidir si serán destruidos o enterrados en otro lugar.

Algunas de las 824 tumbas halladas.
La necrópolis, una vez documentada, será destruida para levantar allí calles y parques del nuevo barrio. El plan de desarrollo urbanístico de Los Ahijones data de 2004, pero la ejecución de las 15.400 viviendas previstas se ha ido demorando. Hasta ahora sólo se ha realizado un 5% del movimiento de tierras previsto.

El director regional de Patrimonio Histórico, Ignacio Muñoz, contó al diario El País que no se trata de un enclave excepcional; hay otros 60 en toda la región de esa época, y al menos dos (Los Remedios, en Colmenar Viejo; y Sieteiglesias, en Lozoyuela-Navas-Sieteiglesias) se conservan en mejor estado, han sido adaptados como museo “y va mucha gente a verlos”.

Una de las tumbas excavadas en junio de 2011.
Es una de las necrópolis de mayor tamaño de la región. Durante las excavaciones, realizadas en 2010 y 2011 se descubrió que las fosas estaban a 30 centímetros de profundidad, miden entre 160 y 170 centímetros de largo y medio metro de ancho. Los cráneos rescatados estaban orientados al este. Se han hallado ajuares con restos metálicos y cerámicos (puñales, broches, etcétera).

Los visigodos no enterraban a sus muertos junto a sus poblaciones, así que en los alrededores, quizá a kilómetros de distancia, debía haber un importante enclave muy poblado, dado el tamaño de la necrópolis, que aún no ha sido descubierto. Junto a las tumbas no se han encontrado restos de cabañas o construcciones.

Mapa del reino de los visigodos
alrededor del año 500.
La urbe de considerable tamaño que aún no ha sido localizada podría tratarse de Alcalá de Henares, que dista unos 20 kilómetros, que fue un enclave visigodo de importancia.

Los visigodos fueron un pueblo germánico que penetró en el Imperio Romano en el siglo IV y conquistó la península ibérica a inicios del V. En el VIII fueron vencidos por los musulmanes.

La concejal socialista Ana García D'Atri pidió en la comisión municipal de Las Artes que se paralice la urbanización del área sobre la que se asienta el yacimiento, para preservarlo y convertirlo en un hito arqueológico de Vicálvaro. “Cambiaría la concepción cultural de un distrito sin apenas patrimonio, en el que solo hay instalaciones deportivas y el parque Faunia”, añadió.

Restos prehistóricos también serán arrasados
El yacimiento de Vicálvaro está en un valle situado entre Vallecas y Mejorada del Campo, y data de una época que los historiadores sitúan entre los siglos VI y VII de nuestra era. La necrópolis ocupa una planicie otrora cerealera surcada por dos arroyos y con minas para la extracción de sílex. Las fosas sepulcrales muestran las específicas cistas visigóticas, lajas de piedra que bordean su perímetro. En ellas fueron depositados cadáveres de adultos con los cráneos orientados hacia el Este. A ello hay que añadir una veintena de sepulturas de pequeño tamaño para niños. Empero, algunos infantes fueron enterrados en sepulturas para tres cadáveres.

Una vivienda semienterrada
descubierta en Vicálvaro
.
El área contiene también vestigios romanos y medievales. A diferencia de los sarcófagos utilizados por los romanos, los visigodos sepultaban a sus deudos con sus ajuares dentro de cajones de madera, sellados por herrajes y clavos que, en esta ocasión, sí se han conservado. Entre los hallazgos destacan un puñal de la época goda y algunos aros, hebillas y broches de bronce a los que se atribuye valor sólo documental.

En el mismo paraje donde se encuentra esta necrópolis -no lejos del Cerro Almodóvar, la gran meseta de sílex que domina el barrio de Santa Eugenia, junto a la autovía de Valencia- se han documentado también importantes vestigios altoimperiales romanos, otros de la Alta Edad Media, algunos restos islámicos y numerosos otros de la etapa bajomedieval cristiana hasta el siglo XIV. Se trata de cuevas convertidas en habitáculos, además de silos subterráneos para el almacenaje de granos y basamentos de construcciones de poca entidad, pero desplegados por una superficie de seis hectáreas. Por todo ello, la zona en su conjunto compone, por su secuencialidad de civilizaciones (ibera, romana, islámica), uno de los escenarios documentales más completos de la historia arqueológica madrileña, con sedimentaciones consecutivas yuxtapuestas.

Uno de los cráneos hallado en Vicálvaro.
Los visigodos implantaron un sistema de vasallaje del que surgiría el feudalismo. Trocaron su paganismo originario por el cristianismo y protagonizaron una sangrienta guerra civil entre ortodoxos y arrianos, para sucumbir ante el empuje musulmán procedente del Norte de África.

Cuatro son las grandes zonas en las que se ubican los yacimientos descubiertos donde la compañía Sacyr planea erigir 15.400 viviendas en las inmediaciones de la ermita de la Virgen de la Torre, histórico lugar de culto.

Piedra de molino manual encontrada en
Vicálvaro, en el sureste de la ciudad de Madrid.
La necrópolis está cerca del que fue el poblado romano tardío de Estevillas, situado en Vicálvaro, entre los desarrollos de Los Ahijones y Los Berrocales, junto al arroyo de Los Migueles. Debió de ser un poblado agrícola dependiente de Complutum (Alcalá de Henares).

"Los habitantes de este pueblo eran agricultores. Lo señalan el desarrollo de las inserciones musculares de los brazos, el tamaño de la espalda y la forma de sus clavículas. Solían sufrir artrosis y su alimentación era precaria, comiendo, sobre todo, cereales y vegetales, tal y como demuestra el estado de los dientes, muy desgastados por comer pan hecho con molinos de piedra. No hay rastros de violencia en general, ni de enfermedades especialmente importantes, pero sí podemos observar que los niños estaban mal alimentados", comenta Laura Montesinos, arqueóloga especialista en antropología forense.

Las tumbas visigodas serán destruidas
para construir viviendas.
Todos los hallazgos y la investigación se entregaron al Museo Arqueológico Regional, en Alcalá de Henares aunque se desconoce la cantidad de las piezas encontradas. Varias universidades también se han interesado por el yacimiento investigado.

En el lugar iniciaron excavaciones en junio de 2013 un equipo de antropólogos que ha encontrado también un rico yacimiento de utensilios de sílex tallados del paleolítico inferior, bautizado como Charco Hondo. En el yacimiento, de entre 200.000 y 300.000 años de antigüedad, se fabricaban los utensilios y armas para la vida diaria.

El nuevo hallazgo, se encuentra en el límite este de Los Ahijones, cuya extensión total es de 570 hectáreas. Una datación más precisa permitirá delimitar si allí trabajaban neandertales o su predecesor, el Homo heidelbergensis.

Los arqueólogos hallaron en junio de 2013 en
Vicálvaro, un taller del paleolítico que
tiene unos 200 mil años.
El principal valor de Charco Hondo, cuyo perímetro está todavía por delimitar, aunque ya se han desenterrado unos 40 metros cuadrados, es su antigüedad, el hecho de que se haya mantenido completo pese al paso del tiempo, y el buen estado de conservación en el que se encuentra. “Es como si el taller se hubiera quedado congelado en el tiempo”, explica Sergio Bárez, geoarqueólogo y codirector de las excavaciones. En los trabajos participan la junta de compensación, la Dirección General de Patrimonio Histórico y la Universidad Autónoma de Madrid (UAM). Esta parte del distrito donde están previstas 14.500 viviendas está enclavada entre la M-45, el arroyo de los Migueles, la ermita de la Virgen de la Torre y la autopista de Valencia.

En el taller de herramientas recién excavado se fracturaban a golpes hace cientos de miles de años los nódulos (rocas de sílex de forma ovalada dentro de arcilla) con percutores de cuarcita o cuarzo. Era un trabajo de cantería que se ha mantenido en buen estado gracias a la peculiar geología del terreno, añade Bárez.

Zona de yacimientos en
Vicálvaro. Todo se convertirá
en urbanizaciones.
Los arqueólogos que trabajan en el terreno desde 2007 han descubierto hasta ahora 14 yacimientos paleolíticos relacionados con el aprovechamiento de sílex, el equivalente al metal moderno para fabricar utensilios. En el lugar trabajan contra reloj media docena de arqueólogos.

Los expertos obtuvieron las primeras pistas sobre el yacimiento en 2007, cuando comenzaron los trabajos de peritaje de la obra. Dejaron para el final esta área porque está situada sobre una futura zona verde del planeamiento urbanístico en la que no habrá construcciones. “Esta es la verdadera oportunidad para Madrid, el sureste y Vicálvaro de hacer el primer museo en un yacimiento paleolítico in situ al aire libre”, pide la edil socialista Ana García D'Atri, que esta semana reclamó en la comisión municipal de Las Artes que se compatibilice la urbanización del área con la preservación del otro yacimiento encontrado cerca (824 tumbas y restos de 1.500 individuos de entre finales del siglo V y el VII).

Pero la Dirección General de Patrimonio Histórico de la Comunidad ha decidido ya que no preservará el cercano enclave visigodo porque no tiene “relevancia”. Tampoco está previsto que el yacimiento del Paleolítico corra mejor suerte. Se excavará, se estudiará, se extraerán las piezas y luego se tapará. “No pensamos que se convierta en museo al aire libre, porque el lugar es de muy difícil acceso”, indican fuentes de la Consejería de Empleo, Turismo y Cultura. “Cuando se haya terminado de estudiar, el lugar se reservará y se construirá la zona verde prevista”, indican. Lo que no quiere decir, puntualizan, que se destruya nada, porque si es necesario volver a abrir el yacimiento en algún momento se podrá hacer.

Clavo de la época romana hallado en Vicálvaro.
La arqueóloga Ana Crespo, que durante año y medio dirigió estas excavaciones, resalta la riqueza arqueológica de la zona. “No solo son las tumbas, es un área riquísima en Paleolítico, pero, claro, son piedras e interesan menos, aunque un taller lítico como este tiene el mismo valor que cualquier otra excavación. Es nuestro patrimonio”, comenta. Teme que la nueva Ley regional de Patrimonio, que protege menos este tipo de restos, pueda afectar a los hallazgos y pide que, si no se mantienen, al menos, se investiguen.

Vista aérea de Vicálvaro, un antiguo poblado
que pasó a convertirse en un barrio de Madrid.
Vicálvaro era un antiguo poblado en el sureste de Madrid que se convirtió en uno de los 21 distritos que integran la ciudad de Madrid, hace unos sesenta años. Según los cálculos realizados por el Ayuntamiento de Madrid, Vicálvaro será uno de los distritos que más aumente su población en la próxima década. Concretamente, pasaría de los 70.757 habitantes actuales a cerca de 83.000. Este aumento se produciría como consecuencia de los nuevos barrios que se están construyendo en la zona este de Vicálvaro y supondría que la cifra de habitantes subiría un 16% en poco menos de diez años, hacia 2020. A pesar de este aumento, Vicálvaro seguiría siendo una de las poblaciones con menor número de habitantes de la capital. Vicálvaro es el segundo distrito menos poblado, por detrás de Barajas.

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